Estamos en vísperas de un nuevo aniversario por la muerte de Gilda, quien perdió la vida el 7 de septiembre de 1996 cuando un camión embistió al micro en el que viajaba hacia la provincia de Entre Ríos. Junto a ella viajaba su hijo, Fabricio, de quien se supo que relanzó hace poco su carrera como cantante.
En el momento del fatídico hecho, el joven tenía ocho años en aquel entonces. Hoy, con 34 años ya es papá de dos niñas, de nueve y cuatro años respectivamente, y acaba de anunciar su lanzamiento como cantante, en una hermosa manera de rendirle homenaje a su desaparecida madre.
Fabrizio es el fruto del amor de la autora de No me arrepiento de este amor y el empresario Raúl Cagnin, y aunque por la relevancia que al día de hoy tiene Gilda en la música popular fue invitado a decenas de programas, eligió vivir con un bajo perfil hasta que se supo que lanzará su primera canción llamada “Crují”, que presentará el miércoles a modo de homenaje a su madre.
“Muchas gracias siempre por el amor y las buenas energías, abrazo enorme, se vienen cosas hermosas”, Expresó Cagnin en sus redes sociales.
En otro de sus posteo el joven expresó: “A mí las canciones, me gusta dedicarlas. Escribir con el corazón en las manos, con las historias en la retina, poniendo melodía a la vivencia. Pronto van a poder escuchar mis canciones y revivir conmigo”.
En la actualidad, Fabrizio decidió adoptar un nombre artístico y ahora se hace llamar Soy Chio. Su pareja es Brenda, la mamá de sus dos nenas, quien hace algún tiempo emocionó al decir sobre su marido: “La historia de superación y resiliencia que construyó siendo apenas un niño es de las lecciones más importantes que la vida me puso en frente”.
