Cada 1 de agosto se celebra el Día Mundial de la Alegría. Esta fecha tiene su origen en el año 2010, cuando por iniciativa del gestor cultural colombiano Alfonso Becerra se instauró durante un Congreso.
En un principio esta fecha se festejaba en países como Chile, Argentina y Brasil, pero luego comenzó a conmemorarse en todo el mundo.
Desde el punto de vista de la ciencia, estar alegre, feliz u optimista (podríamos denominar a este sentimiento de muchas maneras) es el resultado de un proceso químico de transmisión de neuronas mensajeras “que llevan la felicidad”.
Por ello, el gestor cultural impulsó la celebración del Día Internacional de la Alegría en el marco del primer Congreso de Gestión Cultural de Chile, realizado hace doce años. Desde entonces se celebra todos los primeros de agosto.
El objetivo es muy claro: promover y experimentar ese “sentimiento grato y vivo que suele manifestarse con signos exteriores” como, por ejemplo, “palabras, gestos o actos con que se expresa el júbilo o la alegría”, de acuerdo con la precisa definición del diccionario de la Real Academia Española- RAE-.
Otras celebraciones similares
En el planeta se han creado e instaurado otros días similares, como el Día Mundial de la Sonrisa, (primer viernes de octubre), o el Día Internacional de la Felicidad, oficialmente instituido por la Asamblea General de las Naciones Unidas, los 28 de junio.