Un ingeniero que perdió un ojo a causa de un cáncer ocular se volvió viral en TikTok por compartir su ingeniosa prótesis. Hace dos años decidió ponerle luces LED y ahora convirtió su ojo en una linterna.
Brian Stanley es un ingeniero de 33 años que reside en el sur de California. A los seis años perdió el ojo debido a un retinoblastoma, una enfermedad ocular por la que se forman células cancerígenas en los tejidos de la retina.
Como consecuencia, los doctores tuvieron que removerle el ojo izquierdo: “llevo un ojo postizo desde entonces. En 2017 comencé a usar prótesis de titanio y desde hace dos años empecé a ponerles luces”, explicó en uno de sus videos.
A través de la experimentación de diferentes colores y formas, fue captando la curiosidad de sus seguidores. Incluso, algunos de ellos llegaron a sugerir la idea de que convierta su ojo en una linterna. Poco después, el ingeniero sorprendió con un nuevo video: “Perdí mi ojo por un cáncer, así que hice esto y convertí mi cabeza en una linterna”
Mientras exhibía su más reciente creación, Stanley explicó que su ojo “cyborg” puede iluminar una habitación entera. Su batería dura 20 horas sin calentarse y se apaga con un sensor de proximidad: tan solo debe acercar su mano al “ojo biónico” y este se apaga o se prende, según la intención del ingeniero.
En sus videos virales, Brian demostraba cómo funciona la linterna y los grandes espacios que ésta puede iluminar. Asimismo, asegura que la prótesis puede ser, incluso, mucho más brillante: “es la mitad de mi potencia máxima”. Agregó que su seguridad es primordial y que con el tiempo llegará a la máxima potencia.
Brian cuenta con una página donde se pueden ver otros tipos de ojos “cyborgs” que ha creado para uso personal. Entre ellos, distinguen los que tienen temática de Terminator, Halloween, Pokémon, bandas musicales y una gran diversidad de colores.
Su video más popular cuenta con 10 millones de visitas y más de 40 mil comentarios. Sus seguidores se muestran cada vez más interesados por sus creaciones. Algunos llegaron a sugerirle la invención de una prótesis que conste de una cámara conectada a un smartwatch. Esta podría funcionar de manera similar a la de un capítulo de la serie de ciencia ficción “Black Mirror”, en donde el personaje principal posee un ojo computarizado que almacena sus memorias.