Cuando los días de lluvia hacen su aparición, mantener la limpieza en el hogar puede convertirse en un desafío. Con el ingreso constante de agua, barro y humedad, es fácil que los suelos y alfombras se ensucien rápidamente. Sin embargo, existen trucos efectivos para lidiar con estas situaciones de manera eficiente y sin complicaciones.
1. Trampas para el barro en la entrada
Uno de los principales problemas durante los días lluviosos es el barro que se introduce en el hogar. Un truco simple pero efectivo es colocar alfombras absorbentes o esteras de goma tanto en el exterior como en el interior de la puerta principal.
Estas trampas para el barro ayudan a reducir significativamente la cantidad de suciedad que entra en la casa. Es recomendable sacudir y limpiar estas alfombras con regularidad durante el día para evitar que se saturen de barro y pierdan su efectividad.
2. Limpieza rápida de suelos con vinagre
El vinagre es un excelente aliado para limpiar suelos durante los días de lluvia, especialmente cuando se trata de manchas de barro. Al ser un limpiador natural y desinfectante, una solución de agua caliente y vinagre blanco en partes iguales puede eliminar rápidamente las manchas de barro sin dañar las superficies.
Aplica esta mezcla directamente sobre las manchas con un trapo limpio o una mopa, y frota suavemente. Si los suelos son de madera, asegúrate de secarlos bien para evitar que la humedad los dañe.
3. Secado rápido de alfombras
Si las alfombras han absorbido agua o humedad durante un día lluvioso, es crucial actuar rápidamente para evitar la proliferación de moho. Un truco efectivo es espolvorear bicarbonato de sodio sobre la alfombra húmeda y dejarlo actuar durante 15 a 30 minutos.
El bicarbonato absorberá la humedad y eliminará los malos olores. Luego, simplemente aspira la alfombra para retirar el bicarbonato y cualquier suciedad que haya quedado atrapada. En caso de que la alfombra esté muy mojada, usa un ventilador o deshumidificador para acelerar el proceso de secado.