Este miércoles se estrenó el documental Jimmy Savile: Una historia de terror británica. La serie se centra en una de las tramas más temerosas y escalofriantes de Inglaterra y promete ser lo más visto del catálogo de Netflix.
La docuserie cuenta la vida de Sir James Wilson Vincent Savile, un hombre británico que era muy querido por las personalidades más importantes de la nobleza, como la Reina Isabel, que lo nombró Caballero Papal en el año 1990. Además, su exposición hacía que sea altamente reconocido en Gran Bretaña, ya que era conductor del programa Top of the Pops, en el que trabajó desde la década de los 60 hasta los 90, y también ideó y protagonizó el ciclo de entretenimientos llamado Jim lo arreglará (1975), ambos emitidos por la cadena BBC.
Pese a su popularidad y buena imagen, su historia de vida tomó un giro cuando se descubrió que escondía un secreto que asombró a la opinión pública de Gran Bretaña y que, en la actualidad, lo llevó a tener su propia producción audiovisual en el gigante de streaming más importante.
La descripción del documental comienza mencionando: “El famoso DJ y presentador de televisión Jimmy Savile deslumbra a toda la sociedad británica. Pero tras su imagen poco convencional se esconde una oscuridad incalculable”.
La trama revela, través de una serie de entrevistas, los cientos de abusos sexuales a menores de edad que Savile llevó a cabo desde el año 1955 hasta el 2009. El mecanismo por el cual se vinculó con sus víctimas era justamente por la confianza que generaba en ellos, ya que nadie sospechó que detrás de una cara bonita del prime time de la televisión había un depredador.
El documental muestra dos partes. La primera, con una duración de 79 minutos. Y la segunda, de 91 minutos. Hasta el momento, las críticas fueron positivas y pueden llevarlo a obtener récord máximo de Netflix.
Su macabra historia se conoció recién a partir de su fallecimiento, en el año 2011. Sin embargo, cuentan que un total de 450 personas lo denunciaron a lo largo del tiempo, pero con estrategias y por la demora de la justicia, evitó ir a la cárcel. Hoy en día, es considerado como uno de los peores delincuentes sexuales en Reino Unido.