Morena Rial anunció hace pocas semanas atrás que espera a su segundo hijo. La hija de Jorge Rial se puso en pareja con el cantante de cumbia, Maximiliano Bertorello, y tras confirmar su relación, blanqueó que se agranda la familia ya que está embarazada.
La joven mantiene una gran interacción con sus seguidores en las redes, a quienes -al menos una vez por semana- los deja hacerles preguntas de todo tipo en sus historias y ella responde sin filtros.
Esa es la forma que Morena eligió para comunicar sus nuevos proyectos, peleas familiares, nuevos amores y detalles más íntimos, como las cirugías estéticas a las que se somete para sentirse mejor con su figura y su cuerpo.
Así fue cuando contó en diciembre que habían ingresado una vez más al quirófano por decisión propia para hacerse una abdominoplastia, se arregló los pechos y también se hizo retoques en los labios, entre otras intervenciones.
En las últimas horas, Morena volvió a abrir la posibilidad de que le hagan preguntas y un seguidor se quiso sacar una de sus dudas. “¿No es molesto hacerte la lipo y luego embarazarte?”, fue la consulta que Morena recibió y no dudó en responder.
“No, mi hijo que viene en camino es lo más lindo. Ya voy a tener tiempo de hacerme otra”, afirmó la joven, quien al parecer no le teme al bisturí y mucho menos a realizarse varias cirugías hasta llegar a su objetivo.
El cirujano plástico de Morena Rial reveló los secretos de sus operaciones
En enero, el cirujano plástico de Morena Rial, Diego Órdenes, habló sobre los procedimientos quirúrgicos que tuvo la hija de Jorge Rial.
“Lo de ella fue algo que se llama abdominoplastia, un procedimiento en el cual se saca excedentes de piel, más una lipoescultura que es retirar grasa en zonas del cuerpo para darle un aspecto más ‘adelgazado’ pero con forma”, informó el médico especializado en estética reparadora.
“Ella ya tenía cirugías previas y lo que hicimos fue ‘mejorarle’ ciertos detalles, como la cicatriz que estaba alta y la descendimos para que la pueda ocultar en la ropa interior”, añadió.
“El ombligo lo mejoramos estéticamente para que luzca mejor y ahí tratamos varias zonas con un ultra sonido que genera un poco de retracción en los tejidos para que queden más pegados al cuerpo”, dijo.
“Es realmente un método bastante invasivo el que realizó. La cirugía plástica es toda invasiva, la invasión va a determinar qué tanto entro a los tejidos. Un relleno de labios no es tan invasivo, pero cirugía plástica que involucra cortes y retirar tejidos”, finalizó.