El 14 de marzo se cumplirá el octavo aniversario del fallecimiento de Jorge Ibáñez, el diseñador de alta costura que aún sigue en la memoria de todos y en las prendas que hizo y que grandes figuras conservaron. Hoy su nombre está en los portales y no por su moda sino por un escándalo protagonizado por su madre y su hermana.
En el ciclo “A la tarde” dieron a conocer un video en el que Mabel Ibáñez y su hija Alejandra discutieron fuerte en la mansión del modisto. El escándalo se viralizó inmediatamente.
“¿Dónde están los 200 mil dólares?”, se la escucha decir gritando a Alejandra en la grabación e inmediatamente el periodista Diego Estévez explica: “La disputa es una herencia pero no de la de Jorge, porque esa ya se repartió entre sus padres, es la herencia del papá de Jorge, que murió y dejó 20 propiedades y una caja de seguridad con al menos 400 mil dólares. Parece que Alejandra fue a la caja de seguridad y faltaban 200 mil”.
La hermana de Jorge es cardióloga y vive en Colombia con su familia desde hace tiempo y ahora, en un viaje que hizo a la Argentina, le reclama a su madre la sucesión. Ellas cortaron el vínculo hace dos años y hasta pusieron abogados para que sean intermediarios.
Fue en 2019 cuando Alejandra notó que Mabel no podía seguir llevando la administración de los bienes e inmuebles que tenía. Y señaló a tres personas que la influyen a la hora de decir qué hacer con su patrimonio.
Mabel Ibáñez, la madre de Jorge y dueña de una lengua filosa
Jorge Ibáñez y Mabel tuvieron una relación muy unida, ella trabaja con él en su maison y se encargaba de los números de su atelier. Al fallecer el creativo, la mujer siguió con el negocio. En una de las últimas entrevistas confió varias intimidades sobre la relación con Alejandra.
“Hay dos cosas que Dios aborrece, y lo dice la Iglesia: una de las cosas es la lengua mentirosa. Primero, señores periodistas, cerciórense bien antes de perjudicar a personas que están trabajando, porque yo nunca bajé los brazos aún en el dolor que tuve por la muerte de mi hijo. Y el otro dolor es la ambición de ciertas personas. Y digo ciertas personas porque la ambición de mi hija es desmedida. No puedo ceder mi parte en vida porque no quiero”.
“La ambición de mi hija es tan grande que no mide las consecuencias. No mide que se lo está diciendo la madre que cuidó el patrimonio. No saqué ni un peso, lo digo así, a todo el mundo. Tres abogados puso mi hija y un contador, desconfiando de la madre, pero se fueron como vinieron”, compartió.
Sobre la herencia de Jorge, confió que tiene el departamento que es donde vive actualmente y el auto: “No dejó dinero”.
“Han dicho que mi vínculo con mi hija era ríspido y sí lo era, porque ella era ríspida. Y para mí el enemigo mío se borra de mi mente. Lo borro. Me olvido que existe. Me olvido que tengo familia ya. La forma en que me han tratado, en la que han entrado. Dijeron que los eché, que llamé a la policía, están todos locos…. Han interrumpido en mi casa, tengo videos, lo puse en la Justicia. Fue violencia familiar”, dijo Mabel.
Ella trató de “buitres” a su hija y a quienes quieren quedarse con el patrimonio de Ibáñez; comparó a sus hijos , y comparó a sus hijos y comentó que, aunque tengan los mismos genes, “unos salen buenísimo y otros no”.