Este martes, el diputado nacional, Facundo Moyano, sostuvo una reunión con “jóvenes” sindicalistas. Con plena presencia masculina, debatieron sobre perspectiva de género, conversaron de política y posaron para la foto de ocasión. Lo que no esperaba el diputado nacional era que, tras su publicación en las redes, solo se hablara de un intruso: las botellas de vino.
En su cuenta de Twitter, el hijo de Hugo Moyano escribió: “Reunión con sindicalistas sub 55 de diferentes sectores”. Y agregó: “Charlamos sobre la importancia de hacerle frente a las demandas actuales de los trabajadores en base a 3 objetivos”, continuó el legislador. Se haría viral este miércoles por otras razones.
El diputado nacional pasó a enumerar el temario del ágape, en mesa en U y con platos y copas: “Futuro del trabajo, democracia sindical y perspectiva de género en los sindicatos”.
Ilustró el mensaje con la foto: una veintena de gremialistas sentados a la larga mesa del sindicalismo, en instalaciones de la Asociación Argentina de Aeronavegantes. Una persona sin barbijo. Y ni una sola mujer a la vista.
Gaseosa, agua mineral, platos y un humilde catering de sánguches. En eso, nada raro. Hasta que descubrieron algo entre las patas de la mesa.
Ahí, semiescondidas, asomaban dos botellas de vino. Los usuarios de Twitter no tardaron en encontrar un tubo de tinto en el suelo, a la cabeza de la mesa que lideró Moyano y los memes y algunas críticas no se hicieron esperar.
Este lunes nomás, Facundo Moyano había estado de festejo: el Sindicato Único de Trabajadores de los Peajes .-el gremio que él mismo creó y fue su trampolín político- celebró el lunes su 15° cumpleaños.
Si hacía falta otro indicio para confirmar el descuido, en la escena apareció otra pista: un corcho, con la mancha innegable de bordó, olvidado sobre el mantel y a punto de rodar hacia el piso.
El traspié despertó la siempre dispuesta picardía en la red social. Recordaron allí, con malicia, que hace menos de una semana Moyano acompañó el Día de la Seguridad Vial y pidió por el “Alcohol Cero al volante”. No era norma para reuniones de presumible trabajo.
“Cuiden los detalles”, escribió un usuario. “Que nabos!!! Las copas con líquidos oscuros y las gaseosas todas cerradas”, comentó otro.
Los investigadores de Twitter intentaron adivinar la etiqueta. “Qué tal estaba ese Rutini?”, preguntó @geleguiza, en referencia a la etiqueta de una bodega, cuyos varietales no bajan de los $ 1.200 pesos.
Inmediatamente se retractó: “Le erré, es un DV Catena”. En ese caso, la botella cotiza unos $ 1.050.
Internauta experimentado, el diputado Fernando Iglesias arrimó su apuesta. “Para vos, a qué marca de vino corresponde la botella que los defensores de los derechos de los trabajadores como Facundo Moyano escondieron en el piso, abajo de la mesa?”, inquirió el colega del joven Moyano. “Peñaflor, dale Like. Rutini, dale RT”.
