Después de 18 años de espera, Jennifer López y Ben Affleck parece que finalmente darán el “sí quiero” en el altar. Y así como ellos esperaron prácticamente una vida para concretar sus planes, también lo hizo su acuerdo prenupcial.
La pareja, que estuvo comprometida en 2004, retomó su amor hace un año atrás y apuestan a una increíble relación de familia ensamblada. En medio de su búsqueda por un nuevo hogar y acompañados de sus cinco hijos, Bennifer [como los llaman sus fans] decidió finalmente apostar al matrimonio.
Aún no hay fecha determinada para la ceremonia ni tampoco se conocen demasiados detalles de sus planes a futuro, aunque sí sabemos que buscan poder vivir juntos y formar un nido de amor donde acoger a todos sus retoños.
Los planes de boda están en camino. Pero como todas las grandes parejas de Hollywood, no pueden cerrar el trato sin antes realizar un acuerdo prematrimonial que establezca las exigencias de cada uno.
Entre los puntos más comunes en estos acuerdos, encontramos el tema del dinero, los hijos o las infidelidades.
Algunos famosos establecen un monto destinado a la mujer por cantidad de hijos o años de matrimonio en caso de divorciarse, o indemnizaciones otorgadas en los casos de infidelidad. Aunque el de Bennifer es totalmente diferente y hasta disparatado.
Siendo el mismo reglamento que planeaban firmar hace 18 años atrás, cuando ambos se comprometieron en 2003, Jennifer López exigió una actividad sexual que determinara al menos cuatro encuentros sexuales por semana junto a su esposo.
Con esta cláusula, la pareja buscaría mantener la pasión encendida y con ello reducirían los riesgos de que aparezcan infidelidades entre ellos.
La noticia no fue demasiado sorprendente ya que, con solo ver las fotografías, sabemos que ninguno de los dos puede quitarle las manos de encima al otro. ¿Será la solución a la infidelidad?