La hamburpizza, una creación que une la masa de pizza con una jugosa hamburguesa casera, dando lugar a un plato que promete conquistar los corazones (y estómagos) de los amantes de la comida.
La receta es sorprendentemente sencilla y perfecta para una cena distinta o una reunión con amigos. Lo primero es preparar la masa de pizza. Puedes optar por comprar una masa lista o hacerla en casa con harina, agua, sal, levadura y un toque de aceite de oliva. La clave es que la masa esté bien estirada, ya que funcionará como “pan” para nuestra hamburpizza.
El siguiente paso es preparar la hamburguesa. Utiliza carne picada de buena calidad, preferiblemente con un 20% de grasa para garantizar que quede jugosa. Mezcla la carne con sal, pimienta, y, si deseas, un poco de ajo y perejil picado para darle más sabor. Forma una hamburguesa grande, del tamaño de la base de la pizza, y cocínala a la plancha o parrilla hasta que esté dorada por fuera y al punto que prefieras por dentro.
El armado de la hamburpizza
Una vez que tengas la masa y la hamburguesa listas, es momento de armar la hamburpizza. Coloca una base de masa en una bandeja para horno y cúbrela con la hamburguesa. Encima de la hamburguesa, añade jamón, queso mozzarella, y, si lo deseas, rodajas de tomate, cebolla caramelizada o incluso huevo frito. Las opciones son ilimitadas, y puedes personalizarla a tu gusto.
Finalmente, cubre todo con otra capa de masa de pizza. Pincela la superficie con un poco de aceite de oliva y orégano para darle un toque extra de sabor. Lleva la bandeja al horno precalentado a 200°C y cocina durante unos 15-20 minutos, o hasta que la masa esté dorada y crujiente.
Al sacar la hamburpizza del horno, deja que repose unos minutos antes de cortarla en porciones generosas. El resultado es una explosión de sabores: la textura crujiente de la masa de pizza, la jugosidad de la hamburguesa y la cremosidad del queso fundido, todo en un solo bocado.