Un simpático animal se convirtió en una nueva sensación en el verano de Noruega. Se trata de una morsa que lleva por nombre Freya, que disfruta de juguetear en el fiordo de Oslo con sus cerca de 600 kilos. Si bien el espécimen ha sido divisado en esta zona desde el 17 de julio de 2022, también ha sido observado con anterioridad en el Reino Unido, los Países Bajos, Dinamarca y Suecia, según menciona la agencia AFP.
Freya cada vez está cobrando más fama, debido a que le gusta de subirse a los botes que están de paseo por Kragerø. Hasta un diario local utilizó su sitio de internet para realizar una transmisión en vivo sobre algunas de las travesuras y momentos habituales de Freya.
En las imágenes, además de ser vista en una de sus siestas, aparece cazando un pato o dormitando en diversas embarcaciones que suelen sufrir afectaciones a causa de su peso. “Los daños materiales son una lástima, pero es lo que ocurre con la presencia de animales salvajes”, mencionó Rolf Harald Jensen, un responsable de la dirección de Pesca, al canal TV2.
Pese a ello, las autoridades noruegas han preferido respetar al animal; el cual, desde su juicio, no representa ningún peligro para la población, pero se pidió mantener distancia para evitar algún ataque. “Ella está bien, se alimenta, descansa y parece estar en buen estado”, explicó la dirección de Pesca en un comunicado.
“Una morsa normalmente no representa un peligro para los seres humanos, siempre y cuando nos mantengamos a una distancia segura. Pero si es perturbada por los humanos y no puede descansar lo suficiente, puede sentirse amenazada y atacar”, aclararon.
La morsa Freya se ha vuelto viral; por ello, ahora ya cuenta con su propio canal en YouTube, donde se transmiten fragmentos de su día a día y que de momento cuenta con 39 suscriptores y contando.