El nombre de Jeffrey Dahmer no deja de sonar en las últimas semanas. Primero fue con la serie que Netflix estrenó el pasado 21 de septiembre bajo el título de “Monstruo: la historia de Jeffrey Dahmer”, y ahora con “Conversaciones con asesinos: las cintas de Jeffrey Dahmer”, una docuserie creada por Joe Berlinger que se puede ver también en la misma plataforma.
Estas producciones muestran los hechos, vida y muerte del que fue conocido como “el carnicero de Milwaukee”, uno de los asesinos en serie más despiadados de la historia de Estados Unidos con 17 víctimas a sus espaldas, como también acusaciones de violación, necrofilia, canibalismo y preservación de partes del cuerpo.
El único sobreviviente de los crímenes de Jeffrey Dahmer fue Tracy Edwards, quien hizo posible su captura y también su final. El asesino en serie fue condenado a quince cadenas perpetuas pero apenas tuvo tiempo de cumplir su pena, ya que tres años después de ser arrestado, cuando solo tenía 34 años, fue asesinado en una prisión de Columbia, en Wisconsin.
El asesino de Jeffrey Dahmer fue Christopher Scarver, un preso que había sido condenado previamente (en 1990) a cadena perpetua por matar a Steve Lohman, jefe del programa del Cuerpo de Conservación Juvenil.
Los reportes en medios de comunicación de Estados Unidos apuntan a que Christopher Scarver asesinó a Dahmer cuando se quedó a solas con él y con Jesse Anderson para limpiar el gimnasio. Jesse estaba en la cárcel por haber matado a su esposa y murió, como Jeffrey Dahmer, por los golpes que Scarver les propinó con una barra de metal. “Creo que los funcionarios tuvieron algo que ver con lo que sucedió”, expresó aludiendo a la “coincidencia” de que desaparecieran poco antes de los hechos.
Las incógnitas en la muerte de Dahmer
Lo que condujo a Christopher Scarver a terminar con la vida de Jeffrey Dahmer es una incógnita, pero varios diarios especularon entonces con algunas posibles causas. Varios medios defendieron que las víctimas lo empujaron y se burlaron de él. The New York Times confirmó que Scarver estaba tomando antipsicóticos durante su estancia en prisión y Associated Press publicó una declaración del asesino justificando que fue un pedido de Dios.
Después de matar a Dahmer y a Anderson y ser condenado a dos cadenas perpetuas adicionales a la que ya tenía, Scarver ha estado encarcelado en el Centro Correccional Centennial de Canon City, en Colorado, a más de 1.700 kilómetros del lugar en el que terminó con la vida del temido asesino en serie.