Mantener la casa con un aroma fresco y agradable es un desafío diario. Sin embargo, existe un truco casero increíble que te ayudará a lograrlo sin gastar en costosos productos comerciales: usar aceites esenciales y bicarbonato de sodio. Esta solución natural y económica no solo perfuma tu hogar, sino que también neutraliza malos olores de manera efectiva.
Ingredientes clave
El bicarbonato de sodio es un aliado excepcional en la limpieza del hogar. No solo es capaz de eliminar manchas y desinfectar superficies, sino que también es un poderoso absorbente de olores. Colocar pequeños recipientes con bicarbonato en distintos puntos de la casa (como el baño, la cocina o los armarios) ayuda a neutralizar olores persistentes, como los de la humedad o la comida.
Para añadir un toque de fragancia, basta con agregar algunas gotas de aceites esenciales al bicarbonato. Puedes elegir entre una amplia variedad de esencias, dependiendo de tus gustos. El aceite de lavanda es perfecto para crear un ambiente relajante, mientras que el de limón o menta son ideales para refrescar y revitalizar el aire de tu hogar. Mezcla bien el bicarbonato con el aceite esencial y distribúyelo en diferentes áreas.
Otra manera de utilizar este truco es preparar un ambientador casero en spray. Para ello, mezcla una taza de agua con una cucharadita de bicarbonato y entre 10 a 15 gotas de tu aceite esencial favorito en una botella con atomizador. Rocía este spray por toda la casa, especialmente en cortinas, tapicería o alfombras, para que la fragancia se impregne en los tejidos y dure más tiempo.
Además de este truco casero, puedes mantener la frescura en tu hogar abriendo las ventanas regularmente para permitir la entrada de aire fresco. También es recomendable limpiar superficies con soluciones naturales, como vinagre blanco diluido, que elimina bacterias y deja un aroma limpio.