Veinticuatro dragones de mar nacieron de dos puestas diferentes en el acuario Poema del Mar de Las Palmas de Gran Canaria, de este modo, el el centro europeo se convirtió en el primero que consiguió reproducir esta peculiar especie australiana, prima de los caballitos de mar.
La primera de las puestas fue el 28 de abril y el nacimiento de las crías sucedió en junio. Luego, el 21 de julio se dio la segunda puesta y nacieron nuevas crías que solo miden un centímetro.
Los dragones de mar son una especie sensible al entorno, que necesitan protección por su vulnerabilidad; son un tipo de caballito de mar dificil de criar en cautividad. En España solo se ven en el Acuario de Barcelona y en el Poema del Mar, el cual tiene la mayor colección del país: ocho ejemplares adultos.
El dragón de mar es único en su especie y son los machos los que cuidan de los huevos tras una danza especial que realizan en primavera.
Como explicó el responsable de los dragones y del área de agua salada del acuario de Canarias, Álvaro Albela, esta reproducción es "una gran noticia” dado que “era muy complicado que pasase”. Su trabajo ha sido “muy emocionante y satisfactorio” ya que debieron construir infraestructuras como un tanque específico para el bienestar de esta especie, que tiene más de tres metros de altura.
Esta nueva generación de dragones de mar es alimentada por pipetas rellenas de misidáceos.
Estos animales viven en una zona concreta del sur de Australia y requieren condiciones de temperatura, hábitat, alimentación y sensibilidad muy específicas. Son delicados a los cambios, a las luces, ruidos y vibraciones, que pueden afectarles notablemente.
Sus colores van desde los amarillos a los azules, rojos y violetas en puntos y rayas a lo largo de su cuerpo; su extraña morfología les permite camuflarse entre las algas con las que conviven y la paz que trasmite su flotación.