El 2 de abril, es declarado por Naciones Unidas como el Día Mundial de la Concientización sobre el Autismo, y es importante entender que hay cuestiones ligadas a los derechos de las personas que tienen una condición del espectro autista.
Todas las personas tenemos los mismos derechos humanos fundamentales como: el derecho a la salud, a una educación inclusiva de calidad, al trabajo, a una vida independiente (es decir, tener control de la propia vida y tomar las propias decisiones), a elegir dónde y con quién vivir, al acceso a la justicia, a la no discriminación, a formar una familia, entre muchos otros.
Bajo el lema Un viaje feliz por la vida. La campaña este año enfatiza la importancia de que, tanto niños y adultos con esta condición como sus familias, disfruten de una vida plena y feliz.
El trastorno del espectro del autismo (TEA) es un trastorno de origen neurobiológico frecuente, que afecta a la configuración del sistema nervioso y al funcionamiento cerebral. Acompaña a la persona a lo largo de toda su vida y afecta, fundamentalmente, dos áreas del funcionamiento personal: la comunicación e interacción social y la flexibilidad del pensamiento y del comportamiento
Se calcula que 1 de cada 160 niños aproximadamente será diagnosticado con un trastorno del espectro autista. El diagnóstico se realiza habitualmente entre los 2 y 3 años, aunque ciertos niños con síntomas menos evidentes pueden ser diagnosticados posteriormente. Actualmente se clasifica dentro de los Trastornos Generalizados del Desarrollo (TGD) y comprende un espectro, que admite diferencias en el grado de manifestación de las dificultades, tanto socio comunicativas como a nivel del desempeño cotidiano.
Por esto, es de suma importancia un diagnóstico precoz, para facilitarle a estos niños y sus familias la información necesaria que les permita realizar el abordaje adecuado de esta condición, tanto en el ámbito familiar como en la escuela.
Las capacidades de las personas con autismo varían de acuerdo a la particularidad de cada caso y pueden cambiar con el tiempo. Mientras algunas personas con autismo pueden vivir de manera independiente, otras necesitan constante atención y apoyo durante toda la vida.
Las dificultades de comunicación que pueden presentar, se manifiestan tanto a nivel de comprensión como de expresión y se encuentra implicado tanto el lenguaje verbal, como el no verbal. Mientras algunas personas con TEA tienen habilidades lingüísticas adecuadas, pero encuentran dificultades para utilizarlas en una comunicación recíproca o en el contexto social, otras no emplean lenguaje verbal.
Otra característica de los TEA es que presentan alteraciones en el procesamiento de los estímulos sensoriales, que se puede manifestar como una hipersensibilidad frente a ruidos, luces o cualquier otro estímulo sensorial. Por otro lado, las personas con TEA pueden tener dificultades para responder de manera flexible a las demandas de los diferentes contextos, por lo cual adaptarse a situaciones imprevistas puede suponerles un gran esfuerzo y generarles malestar, angustia o ansiedad.
El autismo suele influir en la educación y las oportunidades de empleo e impone exigencias considerables a las familias que necesitan prestar particular atención y apoyo al familiar con TEA. Las oportunidades brindadas desde el ámbito familiar e institucional, así como de profesionales de la salud, determinan no solo el pronóstico y evolución, también la calidad de vida de las personas con autismo.
Como ciudadanos tenemos aún por delante muchos desafíos, y existen los medios necesarios para que entre todos trabajemos por la concientización. Es importante que juntos podamos transformar realidades y construir una sociedad más justa y respetuosa de la diversidad.
La importancia del CENSO 2022 para obtener datos y concientizar
La importancia del Censo Argentina 2022 tiene varias aristas. Por un lado, el INDEC y la Agencia Nacional de Discapacidad se comprometieron con la sociedad civil y el colectivo de personas con discapacidad a hacer un estudio nacional de las personas en situación de discapacidad en 2023, y para ello, relevarán en el futuro a todos los hogares que hayan respondido que sí, en alguna de las 6 preguntas sobre la existencia de dificultades o limitaciones en las áreas de movilidad, cognición, comunicación, visión, audición, y cuidado personal.
Por otro lado, al contar con los números se puede hacer análisis de los datos del censo, y ver si existe exclusión de estas personas en distintos ámbitos como el educativo, el laboral, el acceso a la salud, entre otros. Además, cuando se identifican necesidades de esta población y las barreras contextuales a las que se enfrentan diariamente, es más sencillo formular políticas públicas que apunten a que exista más justicia y una realidad en la que todas las personas ejerzan plenamente sus derechos y participen activamente de la sociedad, en igualdad de condiciones de los demás.
