Los espejos representan la realidad para muchos, mientras que en otras culturas se ven como reflejos del alma. Además de esto, se les ha atribuido el poder de revelar lo oculto y de influir en la suerte y la desgracia.
En nuestra vida diaria, los espejos desempeñan un papel fundamental, no solo desde una perspectiva estética, sino también como generadores de ambiente en nuestros hogares. A continuación, te brindamos algunos consejos sobre estos elementos que navegan entre la magia y lo terrenal.
Si una habitación recibe abundante luz natural, un espejo puede amplificar la luminosidad del espacio; sin embargo, si hay desorden, podría aumentar la sensación de agobio. Relacionado con esto, podemos hablar de las diversas formas en las que podemos tratar estos artículos para el beneficio de cada casa.
Consejos para decorar con espejos
Un consejo frecuente de los diseñadores de interiores es evitar colocar un espejo frente a la cama. Esta disposición podría contribuir a aumentar la sensación de desorden en un espacio.
Por otro lado, los más inclinados a la superstición argumentan que la razón detrás de esta precaución es que un espejo en esa ubicación podría actuar como una especie de portal, atrayendo a intrusos no deseados durante la noche, los cuales podrían ingresar al hogar mientras dormimos.
En la actualidad, muchas personas utilizan espejos como elementos capaces de transformar la atmósfera y la energía de sus hogares. Es común ubicar fotos frente a los espejos que capturen momentos de felicidad o que representen símbolos de lo que desean atraer hacia sus vidas, como la alegría, la risa, el amor, la amistad, entre otros ejemplos.
El espejo, sin excepción, ejerce un efecto multiplicador, ya sea para lo positivo o lo negativo. Este objeto posee un poderoso manejo de energía, tanto así que a lo largo de los años ha sido empleado en diversos tipos de rituales.
Para terminar, según los entendidos en el tema, uno de los lugares más adecuados para colocar un espejo es frente a la puerta, especialmente si es de tamaño completo. En esta posición, el espejo actuará como un recibidor de visitantes. En este reflejo quedan al descubierto todas sus intenciones, desde las más positivas hasta aquellas que procuran mantener en secreto.