Preparar tacos en casa puede ser una experiencia deliciosa, especialmente si haces la masa desde cero. La clave está en lograr una masa con la textura perfecta, sabor auténtico y forma adecuada. Aquí te compartimos una receta simple que solo requiere tres ingredientes básicos: harina de maíz, agua y sal.
Ingredientes:
- 2 tazas de harina de maíz nixtamalizado (también conocida como harina para tortillas)
- 1 ½ tazas de agua tibia
- 1 pizca de sal
Preparación:
- En un tazón grande, combina la harina de maíz con la sal. Es importante usar harina de maíz nixtamalizado, ya que es la que se usa tradicionalmente para hacer tortillas. Este tipo de harina tiene un sabor característico que es esencial para los tacos auténticos.
- Poco a poco, vierte el agua tibia en la mezcla de harina y sal, mientras revuelves con una mano o una cuchara de madera. Continúa añadiendo agua hasta que la masa tenga una consistencia suave y homogénea. Debe ser manejable y no demasiado pegajosa. Si sientes que está demasiado seca, añade más agua en pequeñas cantidades.
- Amasa la mezcla durante unos minutos hasta que esté bien integrada. Luego, divide la masa en bolas del tamaño de una nuez, aproximadamente. Coloca cada bola entre dos hojas de papel encerado o plástico para evitar que se pegue, y aplánalas con una prensa para tortillas o un rodillo hasta que queden finas, con un grosor de 1-2 mm.
- Calienta una sartén o comal a fuego medio-alto. Cocina cada tortilla durante unos 30-60 segundos por lado, hasta que empiecen a formarse pequeñas burbujas y se vean cocidas. No deben quedar secas ni quebradizas; la textura debe ser flexible pero firme.
Para un sabor más auténtico, asegúrate de utilizar harina de maíz de buena calidad. Además, si buscas un toque extra de sabor, puedes añadir una cucharadita de manteca derretida o aceite vegetal a la masa.