Limpiar la casa es una de las actividades esenciales para mantener el orden. Sin embargo, existen superficies y partes de nuestro hogar que suelen ser difíciles de difícil acceso, ya sea porque están a una altura demasiado alta o si se encuentran detrás de muebles u otros objetos.
Este es el caso de las persianas, las cuáles suelen juntar suciedad si no les limpia con regularidad. Con herramientas y productos que seguramente ya tenés en casa, podés lograr un resultado sorprendente, lo que dejará las persianas limpias y relucientes.
El paso a paso para limpiar las persianas con sólo dos elementos
Para este método casero solo necesitas dos esponjas de cocina y una espátula.
- Primero, toma cada esponja y hace un corte que divida ligeramente las capas, entre la parte amarilla y la verde, con un espacio en el centro. Este espacio permitirá que las esponjas se ajusten fácilmente a los extremos de la espátula, de manera que puedas fijarlas sin problemas.
- Luego coloca una esponja en cada extremo de la espátula y asegúralas bien. Para lograr una limpieza mayor, rocía ambas esponjas con tu solución de limpieza preferida: puede ser un limpiador multiusos, vinagre diluido en agua o incluso un desinfectante suave para ayudar a remover las impurezas acumuladas.
- Con la espátula lista, poné la herramienta entre las láminas de las persianas, asegurándote de que las esponjas queden en contacto con ambas caras de cada lámina.
- Luego, desliza la espátula a lo largo de cada parte, moviéndola suavemente de un lado a otro. Esta técnica permite que cada pasada limpie ambas caras de las persianas al mismo tiempo, lo que te ayudará a retirar el polvo, manchas y residuos acumulados.
Con este método express, no solo vas a lograr una limpieza profunda, sino que también vas a reducir el gasto y tiempo que normalmente dedicarías a esta tarea. Además, al usar solo dos esponjas y una espátula, simplificas el proceso y evitas el uso de múltiples herramientas o paños, lo que hará que tus persianas luzcan como nuevas sin esfuerzo.