¿Te pasó que, por más que laves tus tazas, las manchas de café siguen ahí? Esas marcas oscuras pueden resistirse bastante, pero hay un truco simple que te ayuda a dejarlas como nuevas usando solo un ingrediente que seguro ya tenés en casa.
El truco de limpieza con bicarbonato de sodio
El bicarbonato es conocido por ser un excelente aliado en la limpieza del hogar, y en el caso de las tazas de café, su acción abrasiva pero suave es ideal para remover las manchas sin dañar la superficie.
Paso a paso para eliminar las manchas de café
- Enjuagá la taza: Primero, enjuagá la taza con agua tibia para humedecer las áreas manchadas. Esto facilita que el bicarbonato actúe de forma más efectiva.
- Aplicá el bicarbonato: Agregá una pequeña cantidad de bicarbonato de sodio (alrededor de una cucharadita) directamente sobre las manchas. Podés espolvorearlo en la taza o aplicarlo en una esponja húmeda.
- Frotá suavemente: Con una esponja o un paño suave, frotá el bicarbonato en movimientos circulares sobre las manchas de café. No hace falta aplicar mucha fuerza, ya que el bicarbonato se encarga de eliminar las marcas.
- Enjuagá y secá: Una vez que las manchas se hayan ido, enjuagá bien la taza con agua tibia y secala con un paño limpio.
¿Por qué funciona el bicarbonato?
El bicarbonato es un ingrediente natural que tiene propiedades desodorizantes y abrasivas suaves, ideales para limpiar manchas sin productos químicos agresivos.
Además, elimina olores, así que también es útil si tus tazas tienen algún aroma persistente.