Cómo limpiar la planchita del pelo y poder alargar su vida útil

Dedicar unos minutos a la limpieza de tus herramientas de cabello puede marcar una gran diferencia en tu rutina de cuidado personal.

Cómo limpiar la planchita del pelo y poder alargar su vida útil
Cómo limpiar la planchita de pelo. Foto: Hogarmanía

Aunque laves tu cabello a diario, si no limpiás los artefactos que usás para peinarlo, nunca va a quedar completamente limpio. Es algo que muchas veces pasamos por alto, pero herramientas como la planchita de pelo acumulan residuos de suciedad, humedad o grasa con el uso frecuente. Por eso, es esencial incluir un ritual de higiene para cepillos, peines, secadores y, especialmente, para la planchita de pelo.

El mantenimiento regular de estas herramientas no solo prolonga su vida útil, sino que también evita que transfieran suciedad al cabello recién lavado. Además, garantiza un mejor funcionamiento y cuida tu pelo al reducir el riesgo de daños o quemaduras causados por residuos acumulados.

Herramientas como la planchita de pelo acumulan residuos de suciedad, humedad o grasa con el uso frecuente.
Herramientas como la planchita de pelo acumulan residuos de suciedad, humedad o grasa con el uso frecuente.

El truco para limpiar tu planchita

Limpiar tu planchita de pelo es más simple de lo que parece y no requiere productos costosos ni complicados. Con herramientas que ya tenés en casa, podés dejarla como nueva en pocos pasos.

  • Asegurate de que esté fría y desenchufada: Antes de comenzar, apagá y desenchufá la planchita. Esperá a que esté completamente fría para evitar accidentes o daños.
  • Usá agua y una toalla suave: Humedecé una toalla con agua tibia. Este paso es clave, ya que los limpiadores agresivos pueden dañar el material de la planchita o incluso afectar tu cabello en usos posteriores. Con movimientos delicados, limpiá toda la superficie de las placas.
  • Combatí manchas difíciles con shampoo: Si notás que hay manchas que no salen fácilmente, aplicá una pequeña cantidad de shampoo para el pelo directamente sobre la toalla húmeda. Pasála nuevamente sobre las placas para eliminar la suciedad incrustada.
  • Asegurate de eliminar los residuos: Después de usar shampoo, es fundamental pasar otra vez la toalla humedecida con agua para retirar cualquier resto que pueda haber quedado.
  • Secá y comprobá el resultado: Una vez limpia, dejá que la planchita se seque por completo antes de usarla. Podés pasar el dedo por las placas para verificar que no queden restos de suciedad o productos.

Una planchita limpia no solo garantiza mejores resultados en el peinado, sino que también cuida la salud de tu cabello. Incorporá este simple hábito y mantené tus artefactos en perfecto estado.

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