Hay sabores que nos transportan directamente a esos momentos de la infancia en los que la cocina olía a cosas ricas, a tardes de juegos y a meriendas interminables. El budín de coco con corazón de dulce de leche es, sin dudas, uno de esos placeres.
Esta receta no solo es fácil de hacer, sino que además tiene ese toque especial que transforma cualquier tarde común en una celebración.
Hay sabores que nos transportan directamente a esos momentos de la infancia en los que la cocina olía a cosas ricas, a tardes de juegos y a meriendas interminables. El budín de coco con corazón de dulce de leche es, sin dudas, uno de esos placeres.
Esta receta no solo es fácil de hacer, sino que además tiene ese toque especial que transforma cualquier tarde común en una celebración. Ideal para compartir en familia, para sorprender a alguien querido o simplemente para darse un gusto de los buenos.
La textura húmeda del budín, su aroma inconfundible y el plus de ese relleno cremoso hacen que cada bocado sea una fiesta. Y como si fuera poco, lleva un frosting simple que termina de coronarlo de manera espectacular.
Un budín suave, con esa miga esponjosa y el toque irresistible del dulce de leche fundido en el medio. El frosting de leche y coco le suma un plus de humedad y sabor que lo convierte en una verdadera tentación.
Ideal para sorprender en una merienda especial, para regalar o simplemente para disfrutar un momento de puro placer casero. Porque si hay algo que nunca pasa de moda, es el sabor a hogar.
Para el budín:
Para el frosting: