Cacho Fontana murió a los 90 años y la noticia fue confirmada este martes en horas del mediodía por su hija, Antonella Fontana. Ante los medios que la esperaban en la puerta de la clínica Interplaza, la mujer habló de la muerte de sus padres y contó que el reconocido conductor no llegó a saber del fallecimiento de su ex, Liliana Caldini.
La muerte de Liliana y de Cacho conmocionó a los colegas del ambiente, quienes rápidamente se volcaron a las redes con mensajes de dolor y de despedida.
“No lo puedo creer, pero lo único que les puedo decir es que a papá lo vamos a cremar, como él quería, y a mi mamá la vamos a velar”, dijo la joven desde la puerta del hogar en el que se alojaba desde hace tiempo.
Y luego comentó que aún no saben cuándo ni dónde lo van a cremar, pero que están haciendo los trámites de sus padres junto a su hermana.
“Estamos destruidos. Era un desenlace que iba a ocurrir en algún momento, pero con lo de mi mamá....”, dijo Antonella sobre cómo debieron enfrentar la muerte de sus padres en menos de 48 horas.
Y fue allí que reveló que Cacho no había llegado a saber de la partida de Caldini. “Estábamos esperando para decírselo porque pensamos que le podía afectar”.
La historia de Liliana Caldini y Cacho Fontana
Fue en enero del ‘70 cuando una bella adolescente esperó en la puerta de Radio Rivadavia que el conductor de Fontana Show, salga. Se habían visto minutos antes cuando él la entrevistó por ser la protagonista de un anuncio de cigarrillos y parte de Los Campanelli, el programa éxito de los domingos. En ese momento comenzó una historia de amor entre Liliana Caldini y Cacho Fontana.
Ese mismo día, a la salida del estudio se fueron a tomar una gaseosa a un bar cercano. Al otro día, ella recibió una docena de rosas. Ella tenía 17 años, medía un metro 70 y era la hija de una contadora y un militar retirado. El conductor transitaba los 38 y se había separado de Beba Bidart.
Luego de ese primer encuentro, Fontana le dijo que viajaría a Italia para transmitir el Festival de San Remo para Canal 13. Ella le contó que se iba a Mar del Plata. Días después, el locutor atendió el teléfono en el cuarto de su hotel italiano: “Soy Liliana, estoy con dos amigos y quiero verte”.
Los rumores comenzaron, ellos desmentían el romance. El 23 de abril Cacho cumple años. Festejaron solos, Liliana le regaló un reloj Piaget. En agosto, ambos viajan nuevamente a Italia. En la Argentina, la periodista Valentina, pionera en el rubro chimentos, da la noticia bomba: “Cacho Fontana y Liliana Caldini se casaron en Italia”.
Al regreso a nuestro país, el Aeropuerto de Ezeiza hierve de periodistas esperándolos. “Sí, estamos de novios”, concede él. Cuatro meses después ella anunció: “Dejo la profesión. No tengo vocación. Soy la mujer de Cacho y quiero resguardar nuestra intimidad como algo sagrado. Tuvimos que pelear mucho por esto y ahora tenemos que defenderlo”.
Siete años después Fontana anunció en el programa de su amiga Pinky: “Voy a ser padre dentro de unos meses. Estoy loco de contento y tengo ganas de que sea un varón”. No fue un varón sino dos mujeres: las mellizas Ludmila y Antonella, que nacen luego de un parto tan difícil como riesgoso.
Así, en enero del 82, Liliana anunció: “No estoy enamorada de Cacho. Fueron 12 años casi perfectos pero la crisis es muy grave”. Por su parte, Fontana admitió: “Voy a cumplir 50, estoy en crisis profesional. Liliana tiene 30 y las mujeres de esa edad también entran en crisis”.
