Poder realizar proyectos de reciclaje sostenible que combinen funcionalidad, estética y conciencia ambiental es una actividad que puede ayudarnos a desarrollar nuestra creatividad y autonomía. Este enfoque no solo permite decorar cualquier espacio sin gastar dinero, sino que también fomenta el aprovechamiento de materiales reciclables para reducir la contaminación. En este caso, las botellas de vidrio vacías se transforman en jarrones con un estilo “retro” que suman elegancia a cualquier rincón de tu hogar.
Materiales necesarios
- Botellas de vidrio vacías.
- Porcelana fría.
- Pincel o esponja.
- Pintura a la tiza blanca.
- Pintura acrílica.
- Cepillo de dientes en desuso.
- Barniz.
- Flores artificiales a elección.
Paso a paso para reciclar las botellas de vidrio
- Prepará de las botellas: Lavá las botellas de vidrio y asegurate de que estén completamente secas antes de empezar.
- Aplicá la porcelana fría: Moldeá la porcelana fría sobre el cuello de las botellas y fijala. Podés crear volados o texturas que cubran los bordes superiores, lo que cambiará así el aspecto original del envase.
- Pintura base: Cubrí toda la superficie de las botellas con dos capas de pintura a la tiza blanca, dejando secar completamente entre capa y capa.
- Delimitá y pintá la parte inferior: Colocá cinta de papel para separar la zona inferior de las botellas y pintá esa parte con pintura acrílica color tierra.
- Efecto salpicado: Usá un cepillo de dientes viejo para salpicar pintura acrílica color tierra sombra en la parte superior de las botellas, lo que crea un efecto de pequeñas manchas decorativas.
- Retirá la cinta: Aplicá barniz para darles brillo, proteger la pintura y prolongar la durabilidad de los jarrones.
Una vez finalizado el proceso, podés decorar las botellas con flores artificiales o usarlas como floreros en distintos espacios de tu hogar. Este proyecto no solo aportará estilo a tu hogar, sino que también refuerza el compromiso con el reciclaje y la sostenibilidad.
