Una joven de 24 años contactó a un ex marine estadounidense por Tinder y tras acordar una cita en Palermo, lo drogó y le robó una gran suma en dólares. Ariel, la víctima de 57 años radicó la denuncia, pero la “viuda negra” se dio a la fuga y sigue sin aparecer.
Todo ocurrió luego de que Agustina, tal como aparecía la mujer en la mencionada aplicación de citas, mantuviera contacto con un soldado retirado según informó TN.
En las aplicaciones como Tinder, los perfiles de los usuarios incluyen una presentación básica de cada persona. Los datos que aparecen son el nombre y la edad.
Así se presentó Agustina, una muchacha de, supuestamente, 24 años que tras intercambiar “likes”, se contactó con Ariel, un exmarine norteamericano de 57 años quien acordó con ella un encuentro en la Ciudad de Buenos Aires.
El soldado retirado se animó a probar suerte y ambos comenzaron a chatear por Whatsapp, hasta que finalmente concretaron conocerse en persona para mantener un momento a solas.
“Yo trabajo, quiero tener una cita. Te cocino, vamos tomando mientras cocinamos”, fue la tentadora propuesta que le hizo la mujer al marine.
Aprovechando su breve estadía de vacaciones en CABA, el hombre aceptó y la invitó al edificio donde se hospedaba en Palermo, sobre calle Pacheco de Melo con entrada por la calle Sánchez de Bustamante.
El encuentro fue a las 20. Pero luego de una cena con bebida de por medio, el hombre perdió la consciencia y se despertó al día siguiente a las 9 de la mañana, todavía mareado.
Allí se percató de que le faltaban varias pertenencias: un celular iPhone, casi 10 mil dólares en efectivo que estaban escondidos en una valija, una campera y tarjetas de crédito.
“Cuando paso al baño, terminé el trago y ahí me mareé. Terminé en la cama y cuando me despierto, horas después, el apartamento estaba vandalizado. Me robaron todo. Estuvimos una hora juntos y me metió algo en el trago”, comentó el hombre en diálogo con Telenoche.
“Tenía entendido esto de las viudas negras, pero pensé que nunca me iba a pasar a mí”, agregó al relato.
La sospechosa quedó captada por las cámaras de seguridad del edificio que fueron revisadas por los investigadores, luego de que Ariel pusiera la denuncia.
En las filmaciones comprobaron que en el transcurso de la noche había permitido la entrada de, por lo menos, otros dos hombres de los que se sospecha que actuaron como cómplices. Aunque actualmente no hay detenidos, ni rastros de supuesta Agustina.