El crédito sobre PBI cerró 2018 en su nivel más bajo desde 2010, en solo 10,8%. Así lo informó LCG, que atribuyó el desplome a las elevadas tasas para las colocaciones en pesos y la recesión económica. "Esperamos que la recuperación de la demanda de crédito surja en el segundo trimestre de la mano de una actividad recuperándose y tasas reales positivas pero en niveles razonables", anticipó la consultora.
Tras el mal desempeño crediticio de 2018, enero continuó la tendencia descendente. Según el informe monetario mensual publicado por el Banco Central (BCRA), durante el primer mes del año los préstamos en pesos al sector privado presentaron una caída de 3,7% en números reales y ajustados por estacionalidad. "En términos nominales, el saldo sin estacionalidad tuvo una variación de -1,4% en enero. Así, el crecimiento nominal interanual continuó desacelerándose y se ubicó en 14%", reconoció la entidad.
El stock de crédito total al sector privado promedió en enero $ 1,522 billones, lo que significó una caída nominal de 1,11% (o $ 17.094 millones) con respecto al mes previo. En términos interanuales, en tanto, el crédito al sector privado creció 14,14% en enero (sumó $ 188.638 millones). Sin embargo, LCG señaló que si a ese avance interanual se le descuenta la inflación del período, el crédito privado sufrió una caída real de 23% interanual "superando las contracciones vistas en las recesiones de 2016 y 2014".
Sobre ese punto, Guillermo Barbero, socio de First Capital Group, afirmó: "Por segundo mes consecutivo, el financiamiento global presenta un retroceso, como resultado de las restricciones monetarias impuestas por la política económica que busca reducir los niveles de inflación. Además queda claro que, medido contra cualquier índice de precios, la evolución anual marca una merma importante en valores ajustados".
Las líneas comerciales explican el mal desempeño del crédito tanto en enero como en la variación interanual. En enero, el stock de documentos promedió $ 237.960 millones y mostró una caída desestacionalizada mensual de 4,6%. Los adelantos, por su parte, perdieron 4,8% en el mes, con un stock promedio de $ 144.649 millones. Los números distan del avance que mostraban estas mismas líneas en enero de 2018, con incrementos mensuales de 1,4% y 1,2% para adelantos y documentos, respectivamente.
En la comparación interanual, en tanto, los adelantos mostraron un avance nominal de 9,37%, mientras que el financiamiento mediante documentos cayó 15,42% en los últimos 12 meses. En enero de 2018, en cambio, las dos líneas comerciales mostraban números interanuales positivos, con crecimiento de 25,8% para adelantos y 42,6% para documentos.
Según explicó el BCRA, los costos de los préstamos comerciales tuvieron un desempeño mixto durante el mes pasado, en parte por el recorte de la tasa de Leliq sobre las últimas jornadas. "Por un lado, la tasa de los préstamos otorgados mediante documentos a sola firma promedió 65,2%, mostrando un aumento de 0,4 puntos porcentuales. Por otro lado, la tasa aplicada por el descuento de documentos, que al concentrar operaciones de menor plazo capta más rápidamente los cambios en las tasas de referencia, tuvo un descenso de 1 puntos porcentuales. respecto a diciembre, y promedió 57,7%", señaló el informe.
No obstante, Barbero advirtió: "Aún con la disminución que se observó en las tasas activas de interés en este primer mes del año, ha continuado con fuerza la caída de las financiaciones al sector privado comercial e industrial".