Axel Kicillof y Jorge Capitanich tomaron la delantera y le pidieron al Gobierno nacional revisar el pacto fiscal firmado en 2017 para suspender la baja de tributos locales, por el actual contexto de crisis en las cajas de las provincias. La Casa Rosada lo evaluará en las próximas dos semanas en las audiencias con todos los mandatarios provinciales.
Capitanich, gobernador del Chaco, estuvo ayer en la Casa Rosada e insistió con el pedido en dos reuniones: con el jefe de Gabinete Santiago Cafiero y con el ministro del Interior Eduardo de Pedro. El mandatario bonaerense, por su parte, ya lo había hablado con el presidente Alberto Fernández.
Capitanich le entregó a Cafiero y De Pedro la copia de un documento firmado por los ministros de Economía de 18 provincias, de las 19 que rubricaron el pacto en noviembre de 2017 con la entonces gestión de Mauricio Macri.
El pedido se venía cocinando desde hace un mes. Pero Kicillof y Capitanich se largaron a trasmitirlo después de obtener el aval de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien incluso en la noche del jueves exigió se discuta también la Coparticipación Federal de Impuestos.
A la propuesta la iniciaron Kicillof, Capitanich y Alicia Kirchner, cuñada de Cristina. Pero rápidamente recogió el respaldo del resto de los mandatarios oficialistas y aliados. También apoyan la avanzada los intendentes peronistas del Gran Buenos Aires.
Con su provincia aún sin poder salir de una severa crisis, el massista chubutense Mariano Arcioni expresó públicamente su deseo de suspensión. Lo mismo hizo el misionero Oscar Herrera Ahuad.
En el gabinete del gobernador de Misiones estiman que por el Pacto Fiscal, la provincia litoraleña perdió ingresos por 1.050 millones de pesos entre 2018 y 2019. A eso, señalaron en diálogo con Los Andes, hay que sumarle la caída de otros ingresos por la recesión y la coparticipación federal.
"Le transmití a De Pedro la idea de suspender transitoriamente la aplicación del pacto fiscal para que ellos lo evalúen", dijo Capitanich al salir de Casa Rosada.
El chaqueño, quien también solicitó un auxilio financiero para poder pagar sueldos y aguinaldos este mes, afirmó que De Pedro se comprometió a analizar el pedido en ronda con gobernadores, porque "esto requiere un consenso y una aprobación importante".
Cambio de contexto
El ministro de Hacienda de una de las provincias que lleva la voz cantante le dijo ayer a este diario que si bien el pacto fiscal fue negociado con la gestión Macri, se hizo en otro contexto económico y con perspectivas distintas a lo que luego ocurrió: "El dólar valía 17,75 pesos y hoy cuenta 63. ¡Y la inflación era del 22,7% anual. Era otro país", se exaltó el funcionario.
Como la materia impositiva es facultad del Poder Legislativo, la idea de los gobernadores que impulsan la movida era que esto ingrese en el paquete de la Emergencia Económica que el Gobierno enviará el lunes a la Cámara de Diputados (ver abajo). Pero en la Rosada afirman que no dan los tiempos para estudiarlo e incorporarlo.
El objetivo es suspender por tiempo indeterminado los puntos más sensibles del pacto fiscal, como la baja progresiva de Ingresos Brutos y de Sellos, dos tributos regresivos que impactan directamente en precios, pero son vitales para muchas jurisdicciones.
Según pudo averiguar este diario, también hay otros planteos, como una readecuación de la forma de distribuir el Impuesto a los Combustibles, del cual el 10,44% va a las provincias.
El resto se reparte entre la Anses (28,69%), Tesoro (10,4%), Fonavi (10,07%), fideicomiso de Infraestructura Hídrica (4,31%), Infraestructura del Transporte (28,58%) y Compensación del Transporte Público (2,55%).
En esos últimos puntos hay conflicto, porque los gobernadores aseguran que se “discrimina” a las provincias dado que el nivel de subsidios al transporte en la zona metropolitana de Buenos Aires es proporcionalmente mayor.
Incluso, de lo que le toca de forma directa a las provincias, por ley el 60% va a Vialidad; el 30% a infraestructura; y el 10% al Fondo Especial de Desarrollo Eléctrico del Interior (Fedei). Los gobernadores necesitan urgente más recursos para financiar gastos corrientes, como salarios, aguinaldo y pagos a proveedores.
Nieri: “Puede cambiar de ritmo la baja impositiva”
El minsitro de Hacienda de Mendoza, Lisandro Nieri, aseguró que la provincia continuará con la línea de rebaja de impuestos pero que quizás modifiquen el ritmo de la baja de la alícuota: "Nosotros hemos dicho que bajar la presión impositiva es lo correcto y así lo empezamos a hacer gradualmente desde 2017 hasta 2019 con la aplicación plena del Consenso Fiscal. Mendoza está entre las provincial que lo aplicaron y cumplieron a rajatabla".
"Cuando discutimos el Consenso a fines de 2017 se preveía un escenario de crecimiento que no sucedió. Al contrario, la economía se ha deteriorado. Por lo tanto, entendemos que puede haber un cambio en el ritmo de la baja pero por ningún motivo dar marcha atrás en el Consenso", agregó el funcionario, que viene trabajando en Casa de Gobierno desde la gestión de Alfredo Cornejo.
Además, explicó que el objetivo del Consenso Fiscal es sortear la crisis generando crecimiento. "Se aumenta la base imponible, lo que permite menores alícuotas", señaló.