"No llegamos a fin de mes". Esta es una de las frases comunes que se escucha por estos días. Es que con la inflación que entre enero-mayo fue del 16,3% en Mendoza y una paritaria con una pauta anual del 15% dividida a lo largo de 2018, el poder adquisitivo de los salarios en la provincia está claramente deteriorado.
Esta coyuntura, que se ha acentuado en los últimos dos meses, ha generado que tanto los parripollos, como las familias que venden empanadas, pan casero, tortitas y hasta alfajores de maicena, entre otros, en las esquinas -durante el fin de semana- sean moneda corriente en varios departamentos del Gran Mendoza y de las afueras también.
La "Vasca" Favio García, es una de tantas mendocinas que se encontró, a sus 60 años, con la necesidad de complementar sus ingresos con una nueva actividad económica y encontró en un parripollo bien establecido, la mejor forma para hacerlo.
Su comercio se ubica en calle Cobos y Pedro Vargas de Guaymallén, en un garaje que ella alquila y en donde tiene la parrilla y la freidora para trabajar tres días a la semana: viernes sábados y domingos.
Lejos de los improvisados parripollos de "chapa y parrilla", en su establecimiento se trabaja cuidando la manipulación de los alimentos. "Es una salida ante la falta de trabajo real que hay, no se invierte tanto dinero y se triplican las ganancias (aunque a eso habrá que descontarle los costos)", explicó y al mismo tiempo, con $ 300 una familia se lleva un almuerzo completo: pollo, papas y pan casero.
Qué pasa en el terreno
En el último mes, sólo en la calle Avellaneda desde el Carril Nacional hasta calle Mathus Hoyos de Guaymallén se han instalado dos parripollos, que se sumaron, a otros dos que ya existían, y no se trata de un hecho aislado, en las calles se advierte cómo ha aumentado la venta callejera y ante este panorama, los municipios y la provincia evalúan diferentes alternativas para combatirla sin desatender las necesidades de los vecinos.
La titular de la Dirección de Fiscalización y Control de la provincia, Mercedes Zuloaga, explicó que, este año han conformado una mesa intersectorial de trabajo contra el comercio ilegal en Mendoza, en la que está tanto su repartición como los municipios y el Instituto de Desarrollo Comercial de la provincia, desde la que se trabaja en un plan con acciones concretas para desalentar la venta informal.
"Nosotros nos regimos por la ley de lealtad comercial, fiscalizamos que los comercios exhiban sus precios y que estén correctamente inscriptos en AFIP, para eso, previamente tienen que haber finalizado correctamente los trámites de habilitación con cada municipio, por lo que la coordinación existe", comentó.
No obstante, señaló que se realizan inspecciones en toda la provincia y que han logrado advertir cómo muchos comercios que abren, entregan folletos en las casas, pero sin dar más información que un teléfono para que los vecinos llamen al delivery y que de esa forma logran evadir los controles.
La Municipalidad de Capital, prohíbe la venta ambulante de todo tipo de productos, excepto de frutas y verduras, y aunque no es muy común encontrar puestos de comida ilegal en la vía pública, en los últimos dos meses realizaron 11 procedimientos en los que levantaron puestos de empanadas y otros alimentos. A pesar de esto, al igual que en el resto de los departamentos, el mayor desafío, son los vendedores que circulan con conservadoras, canastas o carritos, ofreciendo sus productos sin las debidas autorizaciones.
En el último fin de semana, sólo en Luján de Cuyo se confeccionaron 30 actas porque se encontró a personas vendiendo alimentos y otros productos sin las correspondientes autorizaciones. El director de Industria y Comercio del municipio, Marcos Balzarelli, señaló que la reapertura del túnel de Cacheuta hizo que muchas personas que se dedican a la venta informal de alimentos se dirigiera hacia esa zona.
“Lo primero que se hace es emplazarlos para que se retiren”, explicó, pero señaló que muchas veces no logran decomisarles la mercadería - “porque saben que no podemos secuestrar lo que llevan adentro de un auto”- y después de sacarlos del lugar no tardan demasiado en volver.
En el caso de Guaymallén, se busca que los comerciantes regularicen su actividad, para que su producción esté sometida a los debidos controles. El titular de la dirección de Comercio del municipio, Javier Massó, explicó que existe una ordenanza que les permite otorgar un período de gracia para que durante tres bimestres estos no paguen tasas municipales, además de la posibilidad de que estén exentos del pago a inspección y sellado.
Pero dicha ordenanza se ajusta mejor a los comerciantes que, aunque no cuentan con las habilitaciones, si disponen de un lugar físico en el que tienen establecida la elaboración y venta de sus productos, muchas veces en el garaje de la propia casa.
El funcionario de Guaymallén señaló que de todas maneras el departamento es muy grande y no se alcanza a cubrir todo el terreno. "Los vendedores se van trasladando para que no podamos descubrirlos", agregó.
Sin embargo, existen puestos fijos en los que más encuentran este tipo de comercio ilegal, como son los accesos a la Feria de Guaymallén o a la del Este. "Por lo general, realizamos de 6 a 8 notificaciones por fin de semana, pero si cediéramos en los controles, esto aumentaría", comentó.
Por su parte, el director de Desarrollo Económico de Maipú, Federico Vázquez de Novoa, señaló que han notado un incremento en la instalación de puestos informales.
“Es una cuestión macro, desde el municipio trabajamos más en acompañar a la gente, con las líneas de financiamiento y hemos visto casos en los que esta situación sirve para agudizar el ingenio y han crecido los pequeños emprendimientos, como por ejemplo, personas que se dedican a la elaboración y comercialización de pastas, vinos caseros, mermeladas, o que ponen su propio taller, y lo que antes hacían a gran escala en una fábrica o empresa, ahora lo hacen para venta directa”, comentó.
Por el contrario, Godoy Cruz, celebra haber erradicado al menos a los parripollos (informales). Según el director de Fiscalización y Control del departamento, Natalio Derinovsky, en el departamento son los mismos vecinos los que denuncian cuando ven que alguien intenta instalar uno.
"Están totalmente erradicados por un tema de higiene y salud pública", dijo.
“En cuanto nos avisan, los inspectores los detectan, nos acercamos al lugar y decomisamos la mercadería. Lo mismo sucede con la venta de empanadas, porque no hay forma de garantizar que se cumplan con todas las reglas de seguridad para evitar intoxicaciones”, agregó.
Con el objetivo de salir adelante
De acuerdo con el economista Pablo Salvador, "el poder de compra ha caído bastante y con cláusula gatillo y todo, difícilmente, los salarios se recuperen por encima de la inflación, que ya está alrededor del 26% -acumulado de mayo a mayo-".
Y aunque señaló que es difícil estimar cuánto poder adquisitivo se ha perdido, porque no todos los trabajadores tuvieron los mismos aumentos, difícilmente alguno haya alcanzado el ritmo con el que aumentan los precios.
Los docentes tuvieron un 15,7 % en tres tramos, hoy ya están por debajo, explicó a modo de ejemplo, debido a que este aumento se terminará de dar recién en noviembre, por lo que hasta el momento no han sumado más que 10,2%, menos que la acumulada en lo que va del año, por encima del 16%.
En este contexto, el especialista detalló que existen dos alternativas a las que recurren las familias para salir adelante: “Si en la familia trabaja uno solo, el cónyuge sale a buscar trabajo (o algún otro integrante del grupo, en edad laboral), o se produce el pluriempleo, es decir que las personas buscan una segunda ocupación para aumentar los ingresos”.
En esta segunda opción entran desde las llamadas "changas", hasta la instalación de comercios, ya sean debidamente habilitados, como los que funcionan en la clandestinidad (viviendas familiares, garajes, etc.).
Las ferias, otra opción
Otras opciones que están desarrollando cada vez con más fuerza son las ferias barriales, en donde muchas personas en vez de regalar cosas en desuso como indumentaria, calzado o elementos del hogar, los comercializan a bajos precios. Ejemplo de ellos son las "exitosas" del Barrio Cano en Ciudad, la de Ugarteche que abre los domingos en Luján de Cuyo, entre otras.
En Maipú aseguraron que están atentos a la instalación de ferias en plazas y en lugares alejados del centro de Maipú al que las personas acuden para ofrecer algo, un fenómeno que está creciendo.