El ritmo de incremento del precio de la bolsa de cemento de 50 kilos se redujo a la mitad en los últimos ocho meses.
Para los constructores la desaceleración se explica por la fuerte caída del consumo y por la estabilidad que ha mostrado el dólar en 2016.
Según un relevamiento de mercado realizado por Los Andes, actualmente los corralones de Mendoza venden la bolsa de cemento a $ 128 en promedio. En febrero pasado, un estudio similar reveló que el valor de venta de ese insumo alcanzaba los $ 112. Por lo tanto, en los últimos ocho meses la bolsa de 50 kilos aumentó un 14,28% y tuvo un ritmo de suba de 1,78% mensual.
Un año atrás la situación era muy diferente. Si se compara el precio de la bolsa de cemento de 50 kilos en febrero de 2015 ($ 71) contra febrero de este año ($ 112), se deduce un aumento del 57,74% y un incremento promedio mensual del 4,81%.
El cambio de escenario
Referentes del sector de la construcción de Mendoza explicaron qué cambió en el último año para que el ritmo de aumento del cemento bajara del 4,81% al 1,78% mensual.
Atilio Calzetta, presidente de la Cámara de Empresas Constructoras Independientes de Mendoza asoció la desaceleración del precio del cemento con la caída de demanda por parte del sector privado.
“En los últimos meses ha empezado a moverse la obra pública, pero la construcción privada ha estado completamente frenada durante todo el año. Eso se tradujo en menor demanda de cemento y por consecuencia, menor aumento de precios”, comentó.
Coincidió con ese análisis Jorge Sanchís, presidente de la Cámara Argentina de la Construcción (filial Mendoza). “La construcción privada continúa estancada y así va a permanecer mientras la inflación siga siendo de dos dígitos y hasta que no bajen las tasas de interés para los préstamos hipotecarios”, opinó.
“Lo que pasa con el precio es consecuencia de la relación entre oferta y demanda. Al haber poca actividad privada el consumo de cemento se mantiene bajo y el precio tiende a estancarse”, indicó.
Similar fue la lectura de Mario Yaser, presidente del Círculo de Constructores de Mendoza, quien explicó que el poco movimiento que hay en la construcción mendocina se concentra principalmente sobre la obra fina, que no demanda la compra de cemento.
“Obra privada prácticamente no hay. El poco movimiento que se registra en ese sector corresponde a la terminación de obras iniciadas con anterioridad y a la realización de tareas para los que no se necesita cemento”, explicó Yaser.
Las estadísticas avalan el análisis de los empresarios. Según la Asociación de Fabricantes de Cemento Portland (AFCP), el consumo de cemento cayó 17% en Mendoza en los primeros ocho meses del 2016 (aun no están disponibles los resultados de setiembre).
Entre enero y agosto del año pasado se consumieron 404.408 toneladas de cemento en la provincia, mientras que este año se demandaron 335.646 toneladas en ese mismo período.
El efecto dólar
Para los constructores la estabilidad del dólar también ha sido un factor determinante sobre el precio del cemento.
“La desaceleración empezó a notarse en febrero, cuando el cemento ya había absorbido el efecto de la devaluación de diciembre. Lo mismo ocurrió con otros materiales de construcción, ya que casi todos están íntimamente relacionados con el valor del dólar”, comentó Calzetta.
La misma relación hizo Mario Yaser. “El comportamiento del dólar provocó grandes aumentos en la bolsa de cemento a fines del 2015 y en enero de 2016, pero a partir de febrero se estancó y ya no impactó sobre el valor de ese material”, indicó.
La demanda de insumos bajó 14,2%
A nivel país las ventas de materiales para la construcción cayeron 14,2% en los primeros nueve meses del año en comparación con igual período del año pasado, según una medición del Grupo Construya Calidad.
Ese dato no solo incluye cemento, sino que también hace referencia a la comercialización de ladrillos cerámicos, cal, aceros largos, carpintería de aluminio, pisos y revestimientos cerámicos, adhesivos y pastinas, pinturas impermeabilizantes, sanitarios, grifería y caños de conducción de agua.
En setiembre tampoco se obtuvieron buenos resultados. La medición registró una caída de las ventas del 17,9% en comparación a igual mes del año pasado, aunque estuvo lejos de ser el peor mes del año (en julio bajaron 23,9%).
