Un temporal de lluvia y fuertes vientos que afectó a la costa bonaerense y en menor medida al interior provincial, dejó decenas de evacuados, rutas cortadas, cientos de escuelas sin clases y barrios anegados sin luz. El fenómeno se inició la noche del viernes, pero se profundizó entre el atardecer del domingo y ayer. En distritos como Necochea y Tres Arroyos, el agua cubrió campos que aún no pudieron recuperarse de inundaciones recientes, por lo que se prevén fuertes pérdidas.
En la periferia de Mar del Plata, fueron evacuadas 50 personas, la mayoría niños de Parque Hermoso, mientras que en Parque Palermo varias familias dejaron sus casillas por su cuenta. Muchos no quisieron irse por temor a los robos. “Tuvimos que asistir con colchones, frazadas y pañales a unas 30 personas en sus viviendas por esa razón”, admitió Martín Aiello, secretario de Desarrollo Social de General Pueyrredón. La situación se repitió en otros barrios marplatenses como La Herradura, Villa Evita, Newbery y Nuevo Golf.
Por la mañana, ya no se dictaban clases en unas 15 escuelas y el intendente Gustavo Pulti, tras reunirse con un comité de crisis, decidió suspender la actividad escolar en todos los niveles durante la tarde, debido a los inconvenientes que dejaron los más de 150 milímetros caídos. Hoy tampoco abrirán las escuelas. Dos tramos de la ruta 11, Playa Escondida y arroyo El Durazno, están cortados.
En Necochea, no hubo evacuados, pero desde temprano se suspendieron las clases. Los casi 200 mm caídos en menos de 4 días, anegaron varias casas que fueron protegidas con silos bolsa. “La negativa de la gente a abandonar sus casas nos exige un esfuerzo mayor para asistirlos, con ropa seca, alimentos y elementos para calefaccionarse”, reconoció el jefe de Defensa Civil, Juan Llorens. El intendente interino José Luis Vidal convocó para hoy a los productores de la región cuyos campos ya estaban inundados antes de este temporal. El desborde del arroyo La Ballenera obligó al corte de las rutas 88 y 86. Vialidad Nacional mantenía cerrada la 228 que une Necochea con Tres Arroyos. Por su parte, Vialidad Provincial cerró la ruta 75 que va a San Cayetano.
En Bahía Blanca, las ráfagas de viento, que superaron los 70 km/h, derribaron árboles y volaron el techo de la escuela 40 del barrio Saladero, donde no hubo clases, al igual que en otros dos colegios de la zona portuaria. La caída de postes y cables dejó a 10 barrios bahienses sin energía eléctrica.
En Tres Arroyos, los más afectados por el temporal con ráfagas que llegaron a los 100 km/h, fueron los balnearios Claromecó, donde hubo evacuados y el viento derribó árboles del vivero y la villa y Reta, cuyas calles de tierra estaban intransitables.
Un panorama similar se advertía en los balnearios Oriente y Marisol. En el sector urbano tresarroyense, donde volaron chapas y cayeron árboles, bomberos debieron rescatar a una mujer que quedó atrapada dentro de su camioneta, en el medio del agua. La localidad de Lin Calel, al sur del distrito, quedó aislada. Allí no hubo clases, al igual que en Patagones, Tandil, Balcarce y General Alvarado.
Lo mismo sucedió en Viedma, provincia de Río Negro, donde cayeron más de 100 mm de agua y hay decenas de autoevacuados.