En medio de la controversia por el incremento salarial de los senadores, la vicepresidenta Victoria Villarruel arremetió nuevamente contra la candidatura de Ariel Lijo para la Corte Suprema de Justicia. Villarruel afirmó que Lijo “no posee los méritos suficientes” para ocupar el cargo al que está propuesto y criticó al presidente Javier Milei por impulsar su candidatura.
Durante un almuerzo en el Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires, la vicepresidenta también mencionó la “intención” de ampliar la Corte Suprema. “Será uno de los temas que se abordarán en los próximos meses”, comentó Villarruel, sin especificar quién impulsa la discusión, aunque se presume que es el Ejecutivo. Sin embargo, lo que más atención generó fue su postura frente a Lijo, a quien ya había cuestionado en marzo.
“No considero que haya sido la mejor elección; queríamos un candidato que nos llenara de orgullo, con la rectitud y sabiduría necesarias para la judicatura más alta. Este no es el caso”, expresó Villarruel, marcando distancia del gobierno de Milei. Lijo se presentará ante la Comisión de Acuerdos en una audiencia pública para defender su nominación y responder a las preguntas de los legisladores.
El enfrentamiento de Villarruel con Lijo también refleja su rivalidad con Santiago Caputo, uno de los principales promotores de la candidatura de Lijo dentro del gobierno. En un gesto que algunos ven como un ataque indirecto a Caputo, la vicepresidenta cuestionó públicamente la propuesta de Milei.
Villarruel subrayó que uno de sus principales problemas con Lijo es que ocuparía la vacante dejada por una mujer, Elena Highton de Nolasco, quien renunció en 2021. Aunque aclaró que su postura no se basa en el feminismo, enfatizó que “hay mujeres brillantes en el ámbito del derecho” y habría preferido que el reemplazo fuera una mujer.
Además, la vicepresidenta criticó el impacto divisivo de la candidatura de Lijo. Afirmó que un juez de la Corte debe garantizar la seguridad jurídica y la confianza del país, y concluyó: “No ha sido la mejor elección”.
En cuanto a la posible ampliación de la Corte Suprema, Villarruel confirmó que es una cuestión real y no solo un rumor. Dijo que el Congreso discutirá próximamente el aumento del número de jueces del máximo tribunal. Este tema también se ha mencionado en el contexto de las negociaciones políticas relacionadas con los nombramientos judiciales, que requieren de mayorías amplias en el Senado.
El kirchnerismo, con su grupo de 33 senadores, es clave para aprobar la designación de nuevos jueces. José Mayans, líder del bloque kirchnerista, advirtió que su grupo no apoyará el pliego de Lijo a menos que el gobierno acceda a negociaciones con la oposición sobre otros nombramientos en la Corte Suprema y otros cargos judiciales importantes.
