Después de tres semanas de silencio absoluto, el excanciller Felipe Solá habló por primera vez sobre su salida del Gabinete de Alberto Fernández y criticó a forma en la que se enteró que dejaría el Gobierno.
En diálogo radial con CNN, Solá expresó: “La forma en que recibí la noticia, que fue un llamado de (Santiago) Cafiero, me pareció que no era la apropiada por una cantidad de razones y se lo hice saber al Presidente”.
El exfuncionario recibió la comunicación cuando ya estaba viajando hacia México para representar a Argentina en la cumbre de la CELAC.
Felipe Solá aseguró que durante su gestión en muchas ocasiones le costó hablar con el Presidente para conocer su posición sobre temas trascendentes para la política exterior y que se sintió defraudado por su salida del gabinete nacional. “Yo pensé que la Cancillería funcionaba muy bien, no lo imaginé”, afirmó sobre la decisión del Gobierno.
En ese sentido, aseguró que no habló con Alberto Fernández. “Uno habla con el presidente cuando lo llaman. No volví a hablar, no me llamó. Con Cafiero fue por WhatsApp. Yo estaba en un avión en El salvador”, contó. “Le pedí que no anunciaran la noticia así no quedaba desapoderado en México, pero la necesidad de anunciar el gabinete era muy grande, y me contestó que los tiempos eran distintos y que lamentaba mucho que así fuera”, agregó.
Solá habló también sobre la designación del exjefe de Gabinete Santiago Cafiero como sucesor al frente de la cartera de Relaciones Exteriores. “Lo que tenga de inexperiencia lo puede solucionar con su cercanía con el Presidente, eso es muy importante. En política exterior se toman decisiones que impactan a todos los argentinos y hay que ser coherentes con lo que piensa el Presidente”, consideró. “Ahí Cafiero tiene una ventaja, tiene otras desventajas de la inexperiencia en la política y en lo diplomático”, agregó.
Por otra parte, el exfuncionario fue consultado por su relación con la vicepresidenta Cristina Kirchner, y reconoció que “no era frecuente” que hablen. Sin embargo, aseguró que recibió “algunas señales de apoyo no oficiales” de su parte. “Me comunicaba a través de otras personas algunas veces. Hablé con ella en noviembre del año pasado, tuve una charla personal y después no he hablado con ella”, afirmó.
En esa línea, profundizó en la interna del oficialismo, que estalló tras la derrota en las PASO en prácticamente todo el país. “Hay que entender esto: se solucionó un conflicto político con un nuevo Gabinete. Lo importante hoy es fortalecer al gobierno, repuntar en las elecciones y prepararse para dos años en el que el desafío es repuntar la economía argentina”, sostuvo Solá.