El Gobierno provincial salió al cruce de la gestión que lleva adelante el presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía, Sergio Massa, por la “corrida” en términos económicos, que llevó a una fuerte suba del valor del dólar blue, traspasando la barrera de los $1000 por cada dólar estadounidense.
En diálogo con Los Andes, el ministro de Hacienda, Víctor Fayad, consideró que la situación macroeconómica es un “desastre” que sin dudas “impacta” en los gobiernos provinciales, que han salido con la intención de tratar de contener los problemas económicos que también, naturalmente, han afectado a las cuentas del Estado.
En este sentido, expresó que, más allá que se trate de un dólar que no es el oficial, “hay muchas cuestiones que, si bien no son importadas, tienen una vinculación directa con el tipo de cambio”.
“El desastre impacta. Hay muchos precios de la economía que están y se rigen al dolar ‘informal’”, mencionó el Ministro, quien también agregó que “toda variación de ese tipo de cambio impacta en las ventas de comercios y en la capacidad real de compra. En estos días hemos visto además que los comerciantes en algunas oportunidades no saben si vender o no, por los valores, falta de stock o por incertidumbre respecto de los precios con los que van a reponer sus productos”, expresó.
Para Fayad, la actual situación, con una brecha cada vez mayor entre el dólar oficial y el blue, sostuvo que “agrega mucha volatilidad a la economía y también impacta en las cosas que la provincia compra, que no son necesariamente cuestiones importadas pero que sí tienen vinculación directa con tipo de cambio”.
“Una vez más, estas medidas desacertadas desfavorecen a los exportadores y mantienen el esquema de especulación que tiene montado el gobierno nacional”.
“Cuentas ordenadas”
Por otro lado, respecto al tema inflacionario, los costos en alza de los productos e insumos y también los futuros pedidos gremiales de aumentos salariales, mencionó que “es una espiral a la que estamos subidos hace ya bastante tiempo”, pero dejó en claro que las cuentas provinciales “están ordenadas” y que tienen las herramientas para sortear los conflictos venideros.
Por otro lado, también confirmó que en la segunda quincena del mes convocarán a los diferentes gremios estatales para encarar la ronda final de las paritarias 2023, con la que cerrarán los últimos dos meses del año, teniendo en cuenta que la inflación se ha potenciado y no hay expectativas, al menos en el corto plazo, que la situación pueda encarrilarse.
Recordemos que la inflación 2023 cerrará, según las expectativas del Gobierno Nacional, en un 136%. No obstante, el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), elaborado por el Banco Central y entidades económicas, calculó, según el informe de agosto (último disponible), un Índice de Precios al Consumidor del 169,3%, muy lejos sin dudas de los acuerdos salariales tanto en términos estatales como privados. En tanto, la inflación acumulada a agosto, según la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas (DEIE), ha sido del 75,7%.
A mediados de septiembre, el Sindicato Unido de los Trabajadores de la Educación (SUTE) y la Asociación Mendocina de Profesionales de la Salud (Ampros) reclamaron por la convocatoria a negociar nuevamente “antes de la segunda quincena de octubre”, aunque el Gobienro se mantuvo en su postura.
Concretamente hasta el mes de agosto los salarios se incrementaron un 69,5%, según lo acordado en la última revisión paritaria, que también incluyó para septiembre y octubre otras subas del 8% respectivamente. No obstante, a ese incremento general también deben sumarse subas correspondientes a ítems particulares, según cada una de las especialidades con las que se desempeñan en el Estado.