El gobierno de Javier Milei quiere materializar con Impsa su primera privatización y el proceso ya está en marcha, sin resistencia alguna. Pero más allá de esta compañía, con el alcance internacional que tiene, otras firmas estatales como Belgrano Cargas, Aerolíneas Argentinas e Intercargo incluso, también tienen impacto en Mendoza, con trabajadores en plena incertidumbre por su futuro.
Según un relevamiento de Los Andes, entre las empresas mencionadas hay cerca de 1500 empleos locales. La compañía metalmecánica se lleva la mayor parte, con 720 operarios; lo sigue la ferroviaria con unos 640, mientras que Aerolíneas e Intercargo acumulan 117 puestos de trabajo en nuestra provincia.
Esto, solo por mencionar aquellas en que el propio presidente ha expresado su voluntad en que dejen de ser estatales o que directamente cierren, como advierte que podría suceder con la línea de bandera, en medio del conflicto sindical vigente. Si se agrega en esa cuenta a los 420 empleados de Correo Argentino, que atravesó cierres de oficinas en Mendoza y un plan de retiros voluntarios en los primeros meses del año, el número de afectados llega casi a las 2.000 personas.
Impsa, la primera en privatizarse
La incursión estatal en Impsa es la más reciente de todas –el salvataje entre la Nación y la provincia se concretó en 2021- y está pronta a terminarse, ya que hubo un paso importante con la licitación el pasado 31 de octubre.
Se abrieron los sobres de ofertas y la firma estadounidense Arc Energy apareció como la única interesada en carrera, rumbo a quedarse con la adjudicación el próximo 30 de noviembre. Aunque hubo una decena de empresas que compraron el pliego, finalmente no avanzaron.
Los pasivos de Impsa rondan los U$S600 millones y el Fondo Nacional de Desarrollo Productivo (Fondep), como accionista mayoritario planteó en la licitación la exigencia de un aporte de U$S25 millones para su capitalización.
Mientras la venta tiende a concretarse, prima el hermetismo entre los empleados y el propio sindicato que los nuclea. Este diario intentó comunicarse en reiteradas ocasiones con el secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Luis Márquez, y no obtuvo respuestas.
La situación en Belgrano Cargas
En el caso de los ferrocarriles, la Nación anunció el pasado 23 de octubre que avanzará en la privatización de Belgrano Cargas y Logística Sociedad Anónima, amparado en la Ley Bases que permitió la venta de las empresas ferroviarias que pertenecen al Estado. Según el vocero presidencial Manuel Adorni, “el año pasado, el Estado puso 112 millones de dólares en esta empresa, dinero que salió de cada uno de nosotros, de todos los argentinos”.
“Para dimensionar del deficiente estado del sistema ferroviaria de cargas, la distancia media transportada hoy es de 500 kilómetros, la misma media que se transportaba hace 50 años. En medio siglo no hemos avanzado absolutamente nada”, criticó el funcionario.
La línea San Martín de Belgrano Cargas es la que opera en nuestra provincia. Según datos que aportaron fuentes ferroviarias a Los Andes, en los talleres de Palmira se encuentra el mayor número de empleados. Son aproximadamente 300 operarios que se encargan del mantenimiento de locomotoras y la reparación de vagones, además de la logística de transporte para salidas del tren hacia el puerto argentino, con las conexiones que llegan desde Luján de Cuyo y de San Juan.
Mientras que en los talleres de la Estación Mendoza, trabajan unos 160 técnicos, que se encargan de las reparaciones generales de locomotoras y grúas que se utilizan para los descarrilamientos. De concretarse el traspaso de estos terrenos a la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza, el personal sería trasladado al Este provincial, aunque son solo trascendidos hasta el momento.
El ferrocarril también cuenta con “cuadrillas de vías y obras” que se encargan de custodiar el traslado de los trenes, tanto en el Norte de la provincia (Jocolí), como en Luján y en el Este (Las Catitas y La Paz). Son alrededor de 40 empleados para esas tareas. Mientras que son 140 los conductores y ayudantes de locomotoras que hay en nuestra provincia. Es decir, en total son unos 640 mendocinos afectados a la Línea San Martín.
La mayoría de los operarios están afiliados a la Unión Ferroviaria que conduce Roque Quiroga en Mendoza y los maquinistas son representados por el sindicato La Fraternidad, dirigido por Osvaldo Albornoz en nuestra provincia. Entre los trabajadores de base reina la preocupación por su futuro, ya que no tienen certeza de los pasos a seguir.
Los sindicalistas se mantienen en silencio y aguardan los movimientos en Buenos Aires. A saber, el secretario general de la Unión, Sergio Sasia, apenas anunciada la privatización del Gobierno, lanzó un guiño a favor. Declaró que “el sistema ferroviario tiene que reconfigurarse” y luego pegó el portazo de la Confederación de Trabajadores del Transporte, diferenciándose de los Moyano.
Qué sucede con Aerolíneas e Intercargo
Sin dudas el mayor foco de atención política estuvo puesto en el conflicto aeronáutico. Después de una serie de medidas de fuerza de los gremios que afectaron vuelos y demoras en pasajeros retenidos en aviones, el Gobierno nacional amenazó con cerrar la empresa Aerolíneas Argentinas y anunció la desregulación del servicio de rampas que ostentaba Intercargo. Este viernes hubo una tregua con los sindicatos, ya que fueron convocados a discutir salarios y retomarán este lunes.
En el caso de Mendoza, Los Andes pudo averiguar que son 82 las personas que trabajan en Aerolíneas en las áreas de comercial y tráfico. No se encuentran contemplados pilotos, porque deben residir en Buenos Aires por política de la empresa.
Hasta el mes de junio eran más de 100 los empleados que había en nuestra provincia, ya que aproximadamente 20 de ellos accedieron a un plan de retiros voluntarios, informó una fuente del sector. En cuanto al reclamo salarial, una fuente reveló que “hay compañeros que cobran $550 mil, no son salarios millonarios como dice el Gobierno”.
En el caso de Intercargo, que se dedica al mantenimiento de aeronaves, desembarque de pasajeros y carga de equipajes, entre otras tareas, son sólo 35 los empleados que tienen en los aeropuertos de Mendoza. En esta empresa en particular, aseguraron que están “atrasados un 90%” en los salarios y que el mínimo se ubica en $600 mil.
El personal de ambas compañías en Mendoza se encuentra representado por la Asociación del Personal Aeronáutico (APA), que lidera a nivel nacional Edgardo Llano, uno de los más combativos en este último tiempo.
Este viernes las autoridades de Aerolíneas Argentinas y representantes de los gremios aeronáuticos acordaron que continuarán “conversando” el lunes, por lo que no habrá medidas de fuerza por reclamos salariales en el corto plazo.
Los gremialistas se comprometieron a mantener la paz social mientras continúen las negociaciones, por lo que aseveraron que no habrá problemas con los vuelos en las próximas semanas. El Gobierno les informó que, de continuar con las protestas, está decidido a iniciar el Procedimiento Preventivo de Crisis que podría derivar en el cierre o el achicamiento de Aerolíneas Argentinas.
