La Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) presentó hoy una acción de amparo solicitando a la Justicia de la Provincia que ordene al Gobierno de Mendoza y a la Dirección General de Escuelas que suspendan las clases presenciales por el lapso de dos semanas.
La solicitud persigue la finalidad de que se ordene una medida “para desacelerar la propagación de la pandemia”.
El organismo ligado al sector kirchnerista, y en coincidencia con el gobierno de Alberto Fernández, entiende que la gestión de Rodolfo Suárez “incurre en una conducta arbitraria cuando omite tomar medidas restrictivas temporarias a la presencialidad a la luz de los alarmantes datos sobre la segunda ola de Covid-19 y de numerosas publicaciones científicas internacionales que señalan el rol de los establecimientos escolares en la cantidad de personas infectadas y decesos”.
Se señala en el texto del Amparo que la Provincia de Mendoza se encuentra técnicamente en situación de “alto riesgo sanitario” y por lo tanto en condiciones epidemiológicas que ameritan “adoptar medidas de limitación de la circulación”.
El pedido de suspensión de presencialidad en las actividades educativas “se sustenta en publicaciones científicas de prestigio internacional y especialistas” que indican, por ejemplo:
- “Las simulaciones realizadas en Europa sugieren que la reapertura de escuelas puede aumentar el riesgo de transmisión en comunidades donde la transmisión ya es alta”.
- “Los niños mayores de 10 años pueden transmitir el SARSCoV-2 tan eficientemente como los adultos”.
- “Sin mitigación se corre el riesgo de que la transmisión se agrave, esta vez con variantes más virulentas que resultará en más cuarentenas, cierres de escuelas y ausentismo”.
- “Hubo treinta mil (30.000) muertes más por Covid -19 en los escenarios de la reapertura de instituciones educativas”.
- “A pesar de las medidas de seguridad, las instituciones educativas tendrían un rol en la transmisión del virus”.
- “La apertura de los establecimientos escolares impacta negativamente en el crecimiento de contagios y decesos debido al SARS-CoV-2 y que el cierre de los mismos constituye una estrategia valiosa para mitigar su transmisión”.
- “Es conveniente abrir escuelas sólo cuando la transmisión es baja y cuando se pueden implementar medidas de mitigación apropiadas”.
- “Las clases presenciales incrementan los casos”.
Recordemos qeu desde la Dirección General de Escuelas (DGE), que dirige José Thomas, confirmaron que “todo sigue igual hasta que no haya nuevo aviso”, más allá de la sugerencia del Gobierno nacional en torno a dejar sin efecto las clases presenciales por dos semanas, hasta el 30 de abril.
En este sentido, acorde a lo que anunció la semana pasada el gobernador Rodolfo Suárez, precisaron que la intención es “mantener la presencialidad todo lo que se pueda”.
De esta manera, la provincia no modificará el actual sistema y apela, además, al retorno a las aulas de quienes ya recibieron al menos una dosis de vacuna y de aquellos que, a pesar de poder hacerlo, optaron por no ser inoculados.