Un dirigente leal a la ministra de Seguridad de la Nación Patricia Bullrich consiguió un alto cargo en la Cámara de Diputados provincial. Enrique Thomas se convirtió hoy en el nuevo jefe del interbloque Cambia Mendoza. El hombre del Pro heredará el puesto que dejó vacante un cormejista de la primera hora: Diego Costarelli, quien emigró de la Legislatura a la intendencia de Godoy Cruz.
Thomas ya es presidente del bloque del Pro en Diputados y militó la candidatura presidencial de Bullrich. Semanas atrás, había algunas dudas sobre su continuidad como diputado, debido a la posibilidad de que fuera designado en algún cargo nacional. Pero esa definición todavía no está y en cambio se precipitó la decisión de nombrarlo al frente de los legisladores oficialistas en la Cámara Baja.
La conducción de Cambia Mendoza está desdoblada en la Cámara Baja. Hay un jefe de interbloque y una conducción para el bloque radical de diputados. La bancada de la UCR, en lo que es otra confirmación de este martes, quedará en manos de la suarista Cecilia Rodríguez, quien ya ocupaba ese puesto.
Por supuesto que, por arriba de ambos, el jefe mayor en Diputados es el cornejista Andrés Lombardi, presidente de la Cámara Baja.
La coalición liderada por Alfredo Cornejo quedó disminuida durante la extensa campaña electoral de este año. Una parte del Pro y el PD se fueron a La Unión Mendocina de Omar de Marchi. Así y todo, en Diputados, los radicales tienen extrapartidarios que deben contener.
Thomas es uno de ellos. Otros son Guillermo Mosso y Sol Salinas, quienes también son militantes de Bullrich en Mendoza. Completa ese grupo Gabriel Vilche, un “recuperado” que se había ido con De Marchi y volvió.
Hay un quinto hombre que es Mauricio Torres, quien tiene un bloque unipersonal, llamado “Hacer por Mendoza”. Torres militaba con el sancarlino Jorge Difonso, pero al final, se separó de él. La familia pudo más: Torres, que también es sancarlino, es cuñado del gobernador Cornejo.
En el Senado, en cambio, los legisladores oficialistas son todos radicales y no tiene sentido el interbloque. Por eso, tal como adelantó este diario, hoy se resolvió que la conducción quedara en manos de dos radicales: Natacha Eisenchlas y Gustavo Soto, como presidente y vice del bloque.
El acomodamiento de un extrapartidario no vino en ese ámbito por el lado de las bancas, sino por el manejo de la Cámara Alta. Hoy se confirmó oficialmente que el exsenador del Pro Pablo Priore, adversario de De Marchi en el Pro, será secretario administrativo de la Cámara Alta. O sea, manejará todo lo que tiene que ver con el personal, viáticos y asesores.
Priore será mano derecha de la vicegobernadora Hebe Casado. Obviamente, los dos también militan por Bullrich en Mendoza. Quedó a la vista que la “motosierra” que prometió la vice en su discurso de asunción arrancará recién después de que los aliados se aseguren el futuro laboral.