El Programa de Promoción de Generación de Empleo anunciado por el presidente Alberto Fernández la semana pasada en Catamarca levantaron la temperatura en Cuyo. San Juan reclamó ingresar y desde Nación se lo concedieron.
El martes, el gobierno de Mendoza hizo lo propio, temiendo una nueva promoción industrial. Y a la par, la presidenta del PJ local, Anabel Fernández Sagasti, en una extraña coincidencia entre oficialistas y opositores de la provincia.
La senadora nacional presentó ese día -aunque recién lo dio a conocer hoy- un proyecto para que los beneficios impositivos del NOA también lleguen a Cuyo: “La política de incentivos para algunas regiones en detrimento de otras nunca fue buena para el país”.
Y consideró que “el modelo de desarrollo industrial debe abarcar todas las regiones del país”.
Un subsidio por tres años
La propuesta nacional, que se plasmó ayer en el Boletín Oficial, implica una rebaja gradual y temporaria de las contribuciones patronales por los nuevos empleados que incorporen las empresas en las 11 provincias beneficiadas. El beneficio regirá durante tres años en sectores económicos determinados, que estén orientados a la producción de bienes.
Entre las condiciones para acceder figura que los empleadores deberán producir incrementos en su nómina de personal, no así ocupando el lugar de otros despedidos sin causa o que cesaron por disminución de trabajo de la empresa o fuerza mayor en el último año. De esta manera, se apunta a la recontratación de despedidos o cesados en los últimos 12 meses.
En particular, incluye la reducción de 70% de las contribuciones patronales en el caso de nuevas contrataciones a trabajadores varones el primer año, 45% el segundo año y 20% el tercero. Para las contrataciones de mujeres, travestis, transexuales o transgéneros, la reducción prevista es de 80% el primer año, 55% el segundo año y 30% el tercero.