Este martes, la histórica lista Verde del gremio de empleados Judiciales recibió un durísimo revés en las elecciones que se desarrollaron en el Poder Judicial. Luego de 22 años, el peronismo/kirchnerismo perdió la conducción del espacio, que quedará en manos de la lista Bordó, que no tiene una orientación política marcada y que se autodefine como “independiente”.
De esta manera, César Llanos, actual secretario general y que iba como integrante de la lista Verde, entregará el poder gremial a Ricardo Babillón, secretario general electo, que tendrá a su cargo el sindicato de empleados judiciales a partir del próximo 24 de noviembre, por un período de 3 años.
En total votaron 1.260 empleados judiciales de los poco más de 1.600 afiliados, en un universo de más de 5.500 trabajadores judiciales. Del total, la lista Bordó consiguió el 41,5% (con 524 votos); en segundo lugar quedó la lista Celeste y Blanca con el 31,6% (con 399 votos); y en un sorprendente tercer lugar la lista Verde, con un 26,7% (con sólo 337 votos).
Desde la Junta Electoral informaron la cantidad de votos, y comunicaron que el escrutinio definitivo se realizaría este mismo miércoles. “Extendemos nuestras felicitaciones a todas las personas que democráticamente han participado en estas elecciones”, acotaron tras conocerse los resultados de la elección.
Como se mencionó, en la lista Bordó “Renovación Judicial”, Babillón será secretario general, y lo acompañarán Silvana Barrera como secretaria adjunta y Emanuel Aciar como secretario gremial.
De hecho, marcaron fuentes judiciales que en la lista “ha habido gente identificada con Franja Morada; pero también otros del peronismo y del Partido Demócrata. No tienen una orientación marcada”, señalaron.
En tanto, la lista Verde Unidad, que lidera el gremio desde el 2001, cuando el histórico Carlos Ordoñez llegó a la conducción, postulaba a María Eva Guevara como candidata a secretaria general, César Llanos -actual titular del gremio- como secretario adjunto; y Laura Carrasco como secretaria gremial.
Por último, la lista Celeste y Blanca, que salió segunda, presentaba a Natalia Palazzolo como secretaria general; mientras que Valentín Landreau era el candidato a secretario adjunto; y Franco Pagano como gremial.
Un nuevo poder gremial
En diálogo con Los Andes, Babillón se mostró profundamente contento por la elección de este martes, al indicar que “se trabajó mucho para conseguir un cambio en un gremio que necesita recuperar el valor del trabajador judicial”.
“Somos una agrupación que luchó contra dos aparatos grandes”, mencionó Babillón, en referencia al actual oficialismo, que ofrecía una tendencia filokirchnerista con la conducción. En tanto, la lista Celeste y Blanca “tenía varios militantes del peronismo”, marcó una fuente judicial a este medio.
Por otro lado, Babillón scomentó que están trabajando en la acción gremial como oposición “desde hace varios años”, y sostuvo que si bien él participó de militancia política en el alfonsinismo en la década del ‘80, con el retorno de la democracia; luego dejó la militancia activa. “No tenemos identificacion política. Tenemos compañeros con todos los pensamientos políticos en la agrupación pero no como gremio. Lo que buscamos y queremos es reconquistar los derechos de los judiciales”, comentó.
Para Babillón, es necesario de ahora en adelante “patear el tablero” y comenzar a presionar políticamente para “paritar con la Suprema Corte”. “Nosotros entendemos que somos empleados de la Corte y no queremos paritar con el Poder Ejecutivo, como actualmente se hace. Nuestra patronal es la Corte y es la que se tiene que sentar con nosotros”, opinó.
El secretario general electo recordó que antes existía un “índice de porcentualidad salarial, en el cual los judiciales estaban atados a los sueldos de los ministros, con categorías y responsabilidades”, pero luego hubo una acordada “que firmó en su momento (Aída) Kemelmajer en la que dejó de ser un tema de la Corte y pasó a paritarse con el Ejecutivo”.
Críticas al oficialismo
Por otro lado, Babillón cuestionó al oficialismo gremial, al sostener que “indudablemente hay un desgaste de quienes conducen el sindicato, porque esta propuesta que realizamos de llevar nuestra lucha hacia adentro del Poder Judicial es lo que comparten los trabajadores y uno de los motivos por los que nos eligieron nuestros compañeros”.
Como principales errores, el sindicalista sostuvo que la lista, que fue conducida en su momento por el histórico Carlos Ordoñez; luego Adriana Domínguez (su pareja) y finalmente Llanos, “permitieron el deterioro salarial a través de estrategias equivocadas, donde se aplastó y ensució el salario de los judiciales”.
“El trabajador judicial históricamente tuvo una ‘asignación clase’ más alta; es decir, un básico alto. Pero se terminó ensuciando con ítems en negro o en gris, por fuera de este ítem de asignación de clase. El tema es que nosotros no tenemos un acuerdo nacional como los docentes que marquen el piso salarial. Por eso se ha ido deteriorando nuestro salario”, marcó Babillón, quien añadió que un trabajador judicial que recién se inicia, cobra un salario de $150.000.
Por último, el flamante secretario general electo del gremio, comentó que hace 38 años que se desempeña como empleado judicial; y que siempre militó en el sindicato de judiciales, aunque nunca llegó a ocupar un puesto. “Soy una persona que no tiene más aspiraciones que poder recuperar el salario de los judiciales. Quiero volver a hacer del Poder Judicial un lugar un poco más justo”, cerró.
