Con la postergación de las elecciones confirmada y el calendario electoral oficializado, Cambia Mendoza, con el gobernador Rodolfo Suárez a la cabeza, comienza a diagramar la estrategia que plasmará en la campaña que se avecina. La hoja de ruta del oficialismo provincial hacia las legislativas 2021 tendrá como ejes la presencia de nombres importantes en la boleta, la ponderación de la gestión local, el antagonismo con el Gobierno nacional y el peronismo local y, además, la tracción territorial de los intendentes.
Si bien por el momento prima la cautela y el tema de los comicios no ha copado aún los discursos de los principales dirigentes del frente oficialista, las fechas del cronograma electoral ya figuran en sus agendas.
La más próxima es el 14 de julio, cuando vence el plazo para la inscripción de alianzas. Pero la más significativa en el mediano plazo es el 24 de julio, fecha límite para la presentación de listas de precandidatos. En esa misma jornada se dará inicio formalmente a la campaña hacia las PASO, que se celebrarán el 12 de setiembre. En tanto, la elección general tendrá lugar el 14 de noviembre.
Ante este escenario, en el seno de la UCR, partido líder de Cambia Mendoza, sostienen que en estos días se dará inicio a las conversaciones respecto a las precandidaturas y a la construcción de la estrategia a desplegar en estas legislativas. El plan oficialista estará enfocado en enarbolar la bandera de la defensa de los intereses de Mendoza apostando a dos referentes de peso en la boleta: Alfredo Cornejo encabezando la lista de senadores nacionales y Julio Cobos la de diputados nacionales. Apalancado a su vez por la gestión provincial y la figura de Suárez, sumado al rol activo de los jefes comunales del oficialismo.
El factor de la pandemia será un elemento insoslayable en esta campaña. En el gobierno son conscientes de que ha signado la gestión y, lejos de lamentarlo, entienden que hay mucho para diferenciarse en cuanto al manejo de la crisis sanitaria que ha tenido la Provincia en relación a la Nación, gobernada por el kirchnerismo.
Imagen y gestión
Las encuestas que maneja el oficialismo arrojan que la gestión actual está muy bien valorada en toda la provincia. Suárez considera que, en cierta medida, en una elección legislativa se plebiscita el rumbo del gobierno y que la gente valorará la apertura de la economía y las libertades que fue impulsando desde temprano la provincia tras el confinamiento estricto del año pasado.
Los allegados al gobernador sostienen que la buena imagen se debe a que Mendoza claramente se ha diferenciado de la estrategia del gobierno nacional para combatir la pandemia y que ha permitido mantener abierta la economía, sostener la presencialidad escolar y cuidar la salud, mientras se hacía frente a la presión de la Casa Rosada para imponer más cierres.
“Hay muy buenos pergaminos para mostrar de lo que ha hecho Suárez y hay muy buenos antecedentes de lo que hizo Cornejo en su momento. Si a eso le sumás a Cobos que también tuvo un buen gobierno y tiene buena imagen, es un buen combo para presentar”, confían desde el entorno del Gobernador. A su vez, subrayan que los tres tienen estilos y modos diferentes pero que “se han plantado” para defender a la provincia cuando ha sido necesario.
Si bien las precandidaturas de los dos ex gobernadores no se han oficializado, puertas adentro se las da como un hecho. No obstante, el principal objetivo hoy de la UCR es consolidar el frente y una vez definido si habrá PASO (internas), comenzarán a hablar de las personas que irán en la boleta. La negociación más dura vendrá con el Pro, pero desde ambos sectores hay voluntad de alcanzar un acuerdo de unidad.
Un clásico de todas las elecciones es la “danza de nombres” para integrar las listas. En el radicalismo aseguran que esa discusión es inminente. Asimismo, resaltan que hay muchas mujeres en consideración para ocupar lugares destacados en la nómina de postulantes al Congreso.
Por un lado, están Pamela Verasay y Claudia Najul que pueden aspirar a renovar sus bancas en el Senado y la Cámara de Diputados. Se suman también funcionarias del Ejecutivo, como la ministra de Salud, Ana Nadal, y la de Cultura y Turismo, Mariana Juri, del entorno más cercano de Suárez. Otra figura del gabinete con chances es la presidenta del IPV, María Marta Ontanilla.
Por otra parte, en el Gobierno provincial aseguran que en esta campaña va a ser muy importante el rol de los intendentes oficialistas. Interpretan que en general todos tienen buena imagen y que estarán muy activos, como ocurrió la elección pasada.
Incluso, no descartan que algún jefe comunal cuyo mandato concluye en 2023 tenga un lugar en la boleta para estas legislativas. El tupungatino Gustavo Soto y el alvearense Walther Marcolini aparecen como posibles aspirantes en este sentido.
Confrontación con el peronismo
Si bien se trata de una elección de medio término, en Cambia Mendoza tienen la certeza de que en el cuarto oscuro los mendocinos van a poner en la balanza dos modelos distintos de gestionar; por un lado, el gobierno Rodolfo Suárez en la provincia y, por el otro, el de Alberto Fernández a nivel nacional.
El enfrentamiento dialéctico con el peronismo durante la campaña rondará principalmente en la contraposición respecto al manejo de la pandemia. Pero más allá de los contrapuntos que existieron, el oficialismo quiere poner el foco en los resultados y destacar que Mendoza siguió funcionando durante este tiempo convulsionado y que no hubo un pico de contagios por encima de lo que sucedía en el resto del país. Asimismo, se hará hincapié en el planteo de que durante el último año hubo un reparto discrecional de recursos y que Mendoza fue discriminada por la Nación en cuanto al envío de fondos.
Sabiendo que Anabel Fernández Sagasti liderará la lista del Frente de Todos, el oficialismo apuesta a que durante las discusiones y debates previos a los comicios la dirigente kirchnerista tenga que dar explicaciones sobre los errores o desaciertos del gobierno de Fernández.
En este sentido, la complicada situación económica que atraviesa el país y los altos niveles de inflación son elementos que juegan en contra del PJ, consideran en el radicalismo.
Por último, se sabe que una de las apuestas electorales del Ejecutivo nacional será la masiva campaña de vacunación contra el coronavirus, ya que se estima que para setiembre la gran mayoría de la población habrá sido inoculada. De todas maneras, en el gobierno mendocino no creen que sea un factor del cual el peronismo pueda sacar rédito y disparan que “no hay que subestimar a la ciudadanía”