Malargüe tiene decidido avanzar con la minería en su territorio y pide una excepción a la legislación vigente que no permite a la minería metalífera como actividad. Lo ha dicho el intendente de Malargüe, Juan Manuel Ojeda, los alumnos de la escuela técnica y ni hablar del sector empresario.
En el Día de la Minería, el jefe comunal sureño avisó que en menos de 60 días ingresará el proyecto a la Legislatura pidiendo la excepción a la ley 7722 para Malargüe. Mientras eso sucede, el gobernador Rodolfo Suárez no pondrá reparos pero pidió “un debate serio” en la Casa de las Leyes.
La avanzada malargüina para desarrollar la actividad minera viene mostrando las cartas con las que quiere jugar. El durísimo revés a fines de 2019 cuando Rodolfo Suárez se acomodaba en el despacho del cuarto piso de la Casa de Gobierno, no se digiere.
Para el propio mandatario es un mal recuerdo. “No la pasé bien”, dijo en Luján de Cuyo luego de inaugurar las instalaciones de la comisaría 11. Sin embargo, reconoce la licencia social que tiene la actividad en ese departamento y que un plebiscito saldría “100 a 0″.
El intendente volvió a la carga con una legislación que le permita desarrollar la minería utilizando cianuro, ácido sulfúrico, entre otras sustancias para los métodos de extracción. Y encontró en el Gobernador a alguien que no le cerrará la puerta, siempre y cuando lo avale la Legislatura provincial en donde Cambia Mendoza tiene amplia mayoría, aún con las objeciones que podría haber de algunos legisladores.
Eso sí, el mandatario provincial aclaró que “no es un intento que dependa de mi”. Sin embargo, remarcó el aval social que tiene Malargüe para hacer minería. “Siempre dijimos que para que haya minería, tiene que haber consenso social. Obviamente en Malargüe hay consenso social, pero es un debate que hay que darlo en la Legislatura. No depende de este Gobernador”, indicó.
Recordó que en ese intento por desarrollar la actividad, aunque no se plasmó en la letra del texto que ingresó a la Legislatura, se apuntaba Malargüe “donde hay una riqueza enorme que nos va a permitir crecer a todos los mendocinos y hacer, a partir de esas riquezas, obra pública y que todos vivan mejor, que todos puedan tener su auto, sus vacaciones, alimentos, vivir con dignidad”.
“Malargüe está insistiendo mucho en ese sentido, hay un fuerte consenso social pero es un debate que hay que darlo en la Legislatura. Veremos y estaremos atentos a lo que suceda”, sostuvo. Y aprovechó para cargar contra los argumentos que terminaron derogando la ley 9209 que era la que hoy permitiría que Malargüe pudiera desarrollar la actividad.
Suárez resalta que “es mentira que es una disputa del agua con el cianuro. Es una gran mentira, son campañas de miedo que confundieron a toda la gente. Si vemos a nuestro alrededor, todo lo que está pasando, no podríamos hacerlo sin la minería. Eso es lo que hay que entender”.
Los frentes que abre Malargüe
La estrategia de avales se diversifica. La participación del municipio en la mesa nacional que trabajaba un Plan Estratégico para el Desarrollo Minero Argentino hace varios meses atrás, marcó una pauta. Y este año, en febrero precisamente, se reunieron funcionarios locales con gente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
El resultado de las reuniones arrojó dos puntos importantes. Por un lado arrancar con una mesa de diálogo para el desarrollo de la minería en Malargüe, dentro de las posibilidades que permite la ley 7722. El otro, en analizar la estructura de funcionamiento y los procedimientos que sean necesario modernizar de la Dirección Provincial de Minería. Y a esto hay que agregar la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) que debe salir de la Legislatura, que es una de las quejas por la demora que le imprimen a los proyectos.
No obstante, en el banco ven con buenos ojos a las industrias extractivas dado que pueden convertirse en un sector clave para el desarrollo en un contexto complicado en términos de pobreza. Para lo cual también entienden que hay que atender las preocupaciones ambientales como también los posibles efectos de la contaminación ambiental. Si Malargüe logra este aval, sería clave.
Con el correr de las semanas desde ese cónclave, se vieron otros hechos que van en la misma línea pro minera en como la visita de alumnos de la Escuela Técnica Química Industrial y Minera N° 4-018 “Manuel Nicolás Savio” de Malargüe a la Legislatura, pidiendo la excepción a la ley antiminera.
El intendente lo ratificó días atrás y avisa que mandará un proyecto de ley en esa línea. Por otra parte, expondrá sobre las expectativas que hay en el departamento durante el foro de metalmecánica y minería que abordará varias aristas la semana próxima.
El sector empresario acompaña, por supuesto, porque remarcan los números de pobreza, la matriz productiva y la posibilidad de generar empleo, además de los ingresos provinciales por tasas, entre otros beneficios.
Los paneles y las participaciones son diversas, incluso el cierre está a cargo del Gobierno provincial. En Malargüe no se rendirán porque entienden que “es no a la fiesta del chivo por los veganos, no a Portezuelo y ahora no a la minería. Estamos de turno”.