El ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, explicó de forma más detallada el decreto 1024/24 publicado en el Boletín Oficial que habilita una nueva forma de comprar medicamentos de venta libre. En su cuenta de X adelantó que ahora esta medicación podrá adquirirse en cualquier negocio, además de las farmacias.
La normativa, firmada por el presidente Javier Milei, el jefe de Gabinete Guillermo Francos, y el ministro de Salud Mario Lugones, habilita la exposición de medicamentos como analgésicos y antiácidos en las góndolas de comercios autorizados, siempre que se garantice la conservación de sus propiedades fisicoquímicas. Además, elimina los requisitos previos para su venta en locales como kioscos y supermercados, con la única restricción de que no se podrán comercializar a menores de edad.
“Hoy por Decreto 1024/24 con firma de Milei, del ministro Lugones y de Francos dimos un paso más en la desregulación del comercio de medicamentos. En el comunicado adjunto del Ministerio de Salud se explica la mayor libertad para la comercialización de medicamentos de venta libre en góndolas en farmacias; pero aquí quiero enfatizar que también elimina todas las restricciones existentes a cualquier negocio para la venta de analgésicos y antiácidos de venta libre”, comenzó Sturzenegger en su tuit.
“Previamente, un comercio cualquiera estaba sujeto a una gran cantidad de requisitos (garantías dinerarias, temperaturas máximas, etc.) para la venta de medicamentos de venta libre que por este decreto se eliminan. Ahora un kiosko o supermercado podrá vender este tipo de medicamentos sin otra restricción que la prohibición de venta a menores de edad”, detalló.
El ministro destacó tres motivos principales para implementar esta medida:
Primero destacó la “comodidad”: Los medicamentos podrán ser adquiridos en supermercados o almacenes, integrándose a las compras diarias. Sturzenegger mencionó a grandes cadenas como Carrefour y Coto.
Como segundo motivo destacó la “accesibilidad”: “En muchos lugares, una farmacia está lejos y entonces poder adquirirlos en otros sitios facilita el acceso a estos medicamentos. Si tengo a un niño/niña con fiebre, no quiero que la regulación imponga la obligación de hacer decenas de kilómetros para ir a una farmacia para comprar Ibuprofeno. Este puede ser un tema menor en la Ciudad, pero no lo es en el interior”.
Finalmente, la “competencia de precios”: “Ya hemos dicho que en antiácidos como el Omeprazol hay diferencias de precios que son de ocho veces. Con un canal comercial más ágil y más focalizado en precio dudo realmente que estas diferencias puedan mantenerse por mucho tiempo. Recordemos que el precio de medicamentos en la Argentina sigue siendo varios órdenes de magnitud más alto que en países europeos (y decenas de veces más que en países asiáticos), así que tenemos mucho trabajo por delante”, comentó.
Además de eliminar restricciones como garantías dinerarias y control de temperaturas en comercios no farmacéuticos, el decreto amplía la lista de medicamentos que pueden venderse sin receta, una acción que ya había iniciado el gobierno en septiembre.
Finalmente, agradeció al equipo de la Secretaría de Planeamiento Normativo y la Secretaría de Legal y Técnica por ayudar a llevar a cabo esta medida.
