El Tribunal de Cuentas emitió el fallo por el juicio parcial al organismo público. Oscar Sandes, administrador de Vialidad, deberá pagar cerca de $3 millones entre multas y cargos.
El escándalo que vincula a empleados de la Dirección Provincial de Vialidad y a sus autoridades, tuvo resolución por parte del Tribunal de Cuentas, luego de que auditara el ejercicio 2019 del organismo y encontrara irregularidades. Empleados y empleadas fueron acusados de utilizar fondos públicos para gastos personales, o que no tenían vínculo alguno con la actividad que lleva adelante el cuerpo estatal.
En un fallo de más de 90 páginas -firmado en disidencia por el presidente del tribunal Néstor Parés y Liliana Muñoz de Lázzaro- en el que se detallan un cúmulo de irregularidades, el Tribunal de Cuentas multó a Oscar Sandes con $98.000 pero le aplicó cargos en forma solidaria por una suma millonaria cercana a los $3 millones. Cabe recordar que los “cargos” implican la devolución de un dinero gastado que no tiene respaldo contable.
Sandes no fue el único sancionado: una suerte similar corrieron varios funcionarios de jerarquía del DPV, como la Jefa de la División de Tesorería, Juana Miriam Herrera, entre otros empleados.
Sandes, tiempo atrás cuando se ventilaron las irregularidades, había asegurado que “acá (en Vialidad) se robaba arriba, en el medio y abajo. No leí nunca que el Tribunal ni que la Fiscalía investigara. Soy la denuncia en sí misma; era ‘vox populi’ cómo se robaba", dijo.
Además, se adjudicó la presentación judicial que tironea con el gremio al manifestar que “Vialidad hizo la denuncia, y toma la iniciativa, en la Fiscalía 15 de Delitos Económicos para decir lo que estaba pasando”.
La semana pasada trascendió que Sandes estaba preparando la retirada del organismo e incluso se había despedido de los empleados. Hasta ahora, oficialmente, no estaba confirmada su salida de Vialidad.
