El brigadier Fernando Mengo, jefe de la Fuerza Aérea Argentina, fue desplazado de su rol por haber utilizado aeronaves de la institución con fines particulares, lo que implica una “grave violación de la normativa que rige el manejo de los bienes públicos”, según lo determinado por el ministro de Defensa, el mendocino Luis Petri. Además, es investigado por episodios de presunto abuso y acoso.
Mengo, un cordobés de 59 años al que apodaban por su fama interna como “Alberto Fernández”, fue ascendido a la jefatura al asumir el gobierno libertario.
Según las denuncias, realizadas por víctimas el Gobierno busca proteger, el militar habría utilizado aeronaves para viajar unas 32 veces hasta la capital de Entre Ríos para visitar a una novia, la suboficial Yanina Torres, “la primera dama” o “la reina”, como le decían. También, para trasladar familiares desde esa provincia hasta la Base Aérea Militar de Aeroparque (BAMA).
Con más de 2.600 horas de vuelo, Mengo empezó su carrera militar en 1983 en la Escuela de Aviación Militar, donde se graduó en 1986 como alférez del Escalafón del Aire y posteriormente se especializó como piloto de caza. Su carrera operativa lo llevó a integrar unidades clave como las brigadas aéreas de Mendoza, Santa Fe y San Luis, de acuerdo a información oficial publicada por el gobierno de Javier Milei.
El brigadier fue despedido intempestivamente en la tarde del jueves. Petri emitió un duro comunicado explicando que tomó esta determinación ante la necesidad de “garantizar la transparencia, la ética y el respeto a la ley en las Fuerzas Armadas”, según informó en un comunicado. “Esta decisión responde a hechos que ponen en manifiesto el uso indebido de aeronaves de la institución con fines particulares, lo que implica una grave violación de la norma que rige el manejo de los bienes públicos y de las responsabilidades inherentes a su cargo”, amplió.
“He tomado conocimiento de presuntos hechos de acoso y/o abuso que habría sido protagonizado por el brigadier Mengo, lo que constituye una falta gravísima e inadmisible”, agregó el funcionario a cargo de la cartera de Defensa.
Fernando Mengo echado: la investigación que hizo un periodista
Los desmanejos de Mengo se conocieron por la rigurosa investigación que hizo el periodista Federico Teijeiro, que compartió su trabajo con Defensa a fin de comprobar e informar sobre lo que pasaba. El proceso llevó unos nueve meses con datos que le llegaron de sus fuentes, que deberían ser protegidas incluso por el ministro de Defensa, aunque hayan terminado en manos de un comunicador.
De acuerdo al periodista, citado por Clarín, se emplearon dos modalidades para disfrazar el uso de las aeronaves de la institución militar para uso privado. Se anunciaban como vuelos de logística (llevar paquetes o herramientas) falsamente; o como vuelos de instrucción en los que se suelen hacer maniobras, pero en el plan de vuelo se anotaba que iban a Mar del Plata o Bahía Blanca pero después el código era en realidad Paraná.
“Aquí no se usan aviones para trasladar diarios o llevar amigos, aquí hay austeridad, ejemplaridad y no hay encubrimiento o complicidad. La única posición posible era pedir el inmediato relevo. Hay tolerancia cero para los abusos de poder, las irregularidades, para la utilización de bienes públicos para cuestiones privadas”, sostuvo Petri tras echar al jefe de la Fuerza Aérea tan cuestionado.