El Senado provincial aprobó un proyecto de ley que declara la emergencia del sistema sanitario público, por la cual el Ministerio de Salud tendrá herramientas especiales para la gestión administrativa y financiera del servicio.
La iniciativa busca principalmente que la cartera de salud pueda “reorganizar” el trabajo de los profesionales de las especialidades más críticas y realizar compras directas de insumos con menos limitaciones legales. Todo ello para tomar decisiones con celeridad en materia de salud, una de las áreas más afectadas por la “crisis macroeconómica”.
Este proyecto forma parte del amplio paquete de reformas para el sistema de salud que envió el Poder Ejecutivo a la Legislatura. Si lo sanciona también la Cámara de Diputados, regirá por un año, con la posibilidad de prorrogarlo durante un año más.
Según la senadora radical Claudia Najul, la declaración de emergencia en salud es “muy razonable” y acotada. Explicó que el objetivo en cuanto al personal es “exceptuar de límites horarios” a los profesionales de áreas críticas, pero aclaró que la reorganización se realizará “respetando leyes laborales vigentes y convenios colectivos”.
Además, se exceptúan las contrataciones del límite establecido por ley, permitiendo contratar personal necesario para el funcionamiento del sistema de salud.
Respecto de las compras directas, la iniciativa plantea que el límite sea el equivalente a “80 veces el salario mínimo”, lo que representa unos 16 millones de pesos. “No es mucho dinero para la salud, puede costar un tratamiento eso, por eso se desfinancia el sistema”, afirmó Najul.
La preocupación particular en este sentido es la dependencia de insumos importados y su escasez. De hecho, Najul citó como ejemplo el reciente desabastecimiento de repelente en medio del brote de dengue.
La creciente demanda del sistema público de salud es el gran problema que advierten las autoridades, debido a dificultades en el sector privado y en las obras sociales. “No se genera empleo genuino y cada vez hay más gente en el subsector público”, analizó la legisladora oficialista.
A pesar de las bondades descriptas por el oficialismo, la votación en el Senado provincial fue ajustada: 20 votos a favor versus 17 en contra.
VOTACIONES MUY DIVIDIDAS
Con la aprobación de la emergencia en salud, el Senado quedó muy cerca de agotar el tratamiento de las reformas enviadas por el Poder Ejecutivo.
De hecho, este martes fue una jornada intensa en materia de proyectos discutidos y aprobados. Además de la emergencia en salud, se sancionó, entre otras iniciativas, el nuevo régimen laboral para los profesionales médicos.
También se aprobaron proyectos que cambian regímenes de trabajo de enfermeros, farmacéuticos y técnicos radiólogos. Además, se sancionó otro que modifica el proceso de designación del defensor o defensora de las personas con discapacidad.
Prácticamente a ninguno de los proyectos le dio apoyo el gremio de los profesionales de la salud, Ampros, que tampoco ha aceptado la oferta salarial del Gobierno.
En cuanto a la oposición, todos los proyectos sometidos a tratamiento este martes recibieron rechazos del PJ y La Unión Mendocina. En un par de iniciativas, el oficialismo se impuso apenas por un voto, y la paridad en la ley de los farmacéuticos forzó el desempate de la vicegobernadora Hebe Casado.
En la ley de emergencia, por ejemplo, la senadora peronista Mercedes Derrache explicó que su partido había pedido “cambios importantes respecto del personal, que no pudieran tener libre disponibilidad de cambiarlos de un sector a otro y hacer movimientos discrecionales sin respetar el lugar de cada uno”.
En cuanto al régimen salarial de los profesionales, Derrache aclaró que el cambio debería realizarse por “paritarias”. También votaron en contra de la ley para los radiólogos porque desaparece un descanso de 15 días cada cinco meses que tenían como beneficio.
