El fútbol mueve todo tipo de emociones. No hay grieta ni nada que valga. Así pasa en la política, donde quedó demostrado que la celebración era transversal a todo. Peronistas y radicales lo vivieron de la misma forma.
El gobernador Rodolfo Suárez vivió en partido en casa del intendente de la Ciudad de Mendoza, su sobrino Ulpiano Suárez. El coordinador de gabinete del Gobierno, Santiago Suárez, también sobrino del mandatario, fue de la partida.
El menú elegido fue picada. Camisetas, euforia y todo lo que puede dejar una final mundialista. Uno de los hijos del intendente capitalino vive en España, y hubo videollamada para festejar. Se sufrió, pero se festejó y cuentan que el Gobernador no pudo contener las lágrimas cuando Gonzalo Montiel convirtió en gol el último penal para el conjunto de Lionel Scaloni.
“Campeones del Mundo !VAMOS ARGENTINA ¡ #GraciasSelección” escribió el coordinador de Gabinete junto a la foto familiar. Su hermano Ulpiano compartió la misma imagen y escribió: “¡¡Somos campeones!!! Llegó la tercera y todos nos fundimos en un abrazo eterno. La ilusión nos demostró que unidos, podemos lograr grandes sueños y alcanzar las metas. ¡Llegamos hasta lo más alto, gracias Argentina, por la entrega y el ejemplo!”
En el medio de los festejos con el abrazo de todos los Suárez, llegó el saludo desde Chile. Claudio Orrego, gobernador de la Región Metropolitana en el vecino país, no quiso perder la oportunidad de saludar a sus vecinos. “Que grande Messi. Felicitaciones hermano...que partidazo!! Muy merecido!!! Abrazos de corazón”, le escribió el funcionario chileno al intendente de la Capital.
