Los recientes paros en el sector aeronáutico están generando consecuencias graves para Aerolíneas Argentinas y el turismo en general, con pérdidas millonarias y una creciente preocupación por la falta de previsibilidad en los viajes. La Cámara Argentina de Turismo solicita una resolución urgente al conflicto gremial.
Los conflictos gremiales en el sector del transporte aéreo continúan afectando severamente la operatividad de Aerolíneas Argentinas, provocando cancelaciones y demoras que impactan no solo en los pasajeros, sino en toda la industria turística. La Cámara Argentina de Turismo emitió un comunicado advirtiendo sobre las graves consecuencias económicas que están provocando estas medidas de fuerza.
Las huelgas, llevadas a cabo por los trabajadores de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) y los gremios de APLA y Aeronavegantes, generaron importantes interrupciones en los principales aeropuertos del país. Según la Cámara de Turismo, las consecuencias de estas medidas son “incalculables”, no solo en términos de las pérdidas económicas directas, sino también por el desgaste en la reprogramación de vuelos y la pérdida de confianza por parte de los usuarios.
Desde la entidad, señalaron que la falta de previsibilidad afecta tanto a los turistas como a quienes viajan por razones laborales o médicas. “No se trata solo de vacaciones frustradas, hay personas que necesitan viajar por tratamientos de salud o encuentros familiares, y estas demoras causan perjuicios irreparables”, afirmaron.
La Cámara Argentina de Turismo exigió una solución rápida al conflicto, resaltando que la situación es “insostenible” y que es necesario proteger los derechos tanto de los trabajadores como de los usuarios. “Los paros no solo afectan a quienes trabajan en el sector, sino también a los miles de usuarios que confían en la estabilidad del sistema aéreo”, manifestaron desde la entidad.
Además, hicieron un llamado a la preservación de la industria turística como uno de los principales motores económicos del país. “Debemos cuidar una de las principales fuentes de ingreso de divisas para Argentina. Para ello, es imprescindible contar con un marco adecuado para la prestación de servicios aéreos de manera regular y sin interrupciones”.
Los gremios aeronáuticos han indicado que, de no mediar una solución rápida, podrían llevar a cabo nuevas medidas de fuerza. Esto incluye la posibilidad de un nuevo paro de actividades o la interrupción de los centros de capacitación, lo que afectaría la operatividad a mediano plazo al no poder revalidar licencias de pilotos y auxiliares de a bordo.
Mientras tanto, la tensión entre los gremios y el Gobierno sigue en aumento. Los sindicatos aseguran que no han recibido propuestas satisfactorias y que el conflicto podría intensificarse. Desde ATE, uno de los gremios involucrados, sostienen que el problema radica en “despidos y cuestiones laborales que generan gran preocupación”.
El panorama de los próximos días se presenta incierto, con posibles nuevas medidas de fuerza que seguirán afectando tanto a Aerolíneas Argentinas como a otras empresas del sector. Ante esta situación, la Cámara Argentina de Turismo continúa reclamando una resolución rápida y sostenible para evitar un mayor deterioro de la actividad turística y preservar la estabilidad de una industria que es clave para la economía nacional.