El presidente de la Unión Cívica Radical (UCR), el diputado Alfredo Cornejo, consideró hoy que las marchas opositoras que se desarrollaron ayer en el Obelisco y otros puntos del país fueron “muy fuertes y genuinas”.
Así lo afirmó al exponer esta mañana como orador en el ciclo “Argentina Moving Forward”, organizado por la Cámara de Comercio de los Estados Unidos en Argentina (AmCham).
“Se están incubando ideas de mayor libertad económica y política, y se están organizando alrededor de una oposición que está unida”, dijo Cornejo consultado sobre el tema en la ronda de preguntas, después de su exposición que se realizó en forma virtual.
Para el ex Gobernador, las marchas de ayer “han sido muy fuertes y genuinas, no financiadas por nadie ni convocadas por un partido político”, a pesar de la participación de varios referentes de Juntos por el Cambio, que convocaron y asistieron a las mismas.
Ante un auditorio compuesto por empresarios con intereses en ambos países, Cornejo dijo que tiene un “moderado optimismo” sobre que la Argentina pueda encontrar un rumbo de crecimiento, pero resaltó durante toda su ponencia que para eso debe haber “amplios consensos” en materia política y social y acuerdos entre oficialismo y oposición.
“Para crecer dos décadas al 2% necesitamos un acuerdo de oficialismo y oposición para lograr un equilibrio de gastos e ingresos, y sin déficit que es el padre de la deuda, además de reformas fiscales que permitan un funcionamiento más eficaz de la economía y un modelo más federal”, señaló.
Después de trazar un diagnóstico en el que sostuvo que “terminaremos 2020 con el mismo PBI que teníamos en 2008”, el radical consideró necesarias una reforma laboral y otra jubilatoria, y habló de tarifas, turismo y energía.
Además, criticó el aislamiento social preventivo y obligatorio dispuesto por el Gobierno para combatir el coronavirus, al sostener que “el balance de la cuarentena es muy malo” y “el miedo (al virus) generó enorme concentración de poder” en el Ejecutivo.
Al final de la charla dijo que su gestión como gobernador promovió el empleo privado y por eso “dejó a Mendoza con 9000 empleados públicos menos que al asumir” el cargo y aseguró que en el país hay muchos dirigentes políticos “pro sector privado y pro empresa”.
