En una semana los argentinos volverán a las urnas para elegir a los candidatos tanto a la presidencia, como también para el Congreso Nacional y el Parlasur. En Mendoza, Juntos por el Cambio tendrá una lista de unidad para la Cámara de Diputados. Lisandro Nieri lidera la boleta, tanto con Patricia Bullrich como también con Horacio Rodríguez Larreta.
El exministro de Hacienda de las gestiones de Alfredo Cornejo y Rodolfo Suárez intentará revalidar su banca, y se muestra optimista con el futuro electoral. Crítico de Sergio Massa, asegura que es uno de los “tres” responsables de este “desastroso presente”; y confía en que el próximo presidente sea de Juntos por el Cambio.
Sin embargo, en la propia interna, si bien está alineado a Cornejo, quien tiene preferencias con Bullrich, Nieri prefiere que no se sepa de forma pública por quién toma partido y, más allá que admite las diferencias entre ambas propuestas, asegura que ambos tienen “el mismo objetivo final”.
-¿Cómo analiza la campaña provincial y nacional a una semana de las PASO?
-Si bien es una campaña nacional, se mezclan las visiones sobre la provincia y las discusiones respecto al rumbo provincial. Los resultados que se han dado en otras provincias lo demuestran con los problemas que tiene el peronismo; y se nota la gran preocupación de la gente, que es sobre todo la económica. Esos son los grandes cuestionamientos de la gente, empresarios y vecinos. Creo que claramente hay dos modelos. Uno de ellos es reelegir a la fórmula de esta alianza electoral, que tiene a la vista los resultados, con los peores índices de inflación, del bajo poder adquisitivo de los salarios, con un mínimo que no llega a los U$S 200; reservas en pisos históricos; y una cultura del “parche”, donde hay un Gobierno que desde el primer día solo se plantea llegar, con el daño que implica para la gente, en una Argentina donde el mérito no vale según el Gobierno, donde no se cultiva la cultura del esfuerzo, una Argentina del “chanta”.
La otra opción es cambiar, apuntar una economía normal insertada al mundo, un país donde se revalorice la educación, en el que haya valor en el mérito. Hay que hacer un cambio cultural, educativo, económico y moral profundo.
-¿Qué país va a entregar Alberto Fernández?
-La foto de hoy es pésima por donde se la mire. El gobierno esconde un relevamiento de expectativas de mercado, eso es gravísimo, ya lo quiso hacer con el Indec. Hay muy poca transparencia con las condiciones con el FMI, con las del swap chino, entonces claramente esto se puede agravar. La inflación, con la emisión que hay, está subiendo. Todos observamos en las góndolas lo que está pasando.
-¿Qué consideraciones hace de la campaña de Massa?
-La fórmula es lo mismo que este Gobierno. En vez de ser Alberto, Cristina y Massa; ahora es Massa, Alberto y Cristina. Garantizan malos resultados. Podrás esconder al que peor imagen tiene, pero todo es lo mismo. La valoración la hace la gente. Massa es uno de los tres grandes responsables de este desastroso presente. Dijo que iba a barrer a los ñoquis de La Cámpora y hoy está viendo cómo los puede encantar. Viaja por el mundo mendigando un dólar y adentro hace anuncios agrediendo a quien le pide. Los resultados están a la vista. Es un país que no sabe a dónde va, pero los costos no lo pagan quienes gobiernan sino la gente con los salarios reales en pisos históricos. Además su socia electoral lo definió como fullero ¿Cómo podés pretender que llegue algún candidato si lo presentan como un fullero? Por suerte es una palabra que es un poco más complicada de entender, pero le dijo tramposo, estafador en público. Para ser ministro de economía, para ser un presidente, tenés que ser creíble, honesto, transparente. Nadie se saca un 10 en todo. Pero si te sacás un 1, ni siquiera vale la pena evaluar si tenés habilidades o conocimientos de economía, que creo que tampoco los tiene.
-¿Cómo está Juntos por el Cambio? con la interna entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta...
-Como precandidato de ambas fórmulas, estoy convencido de que tanto Bullrich como Larreta tienen como objetivo un lugar común al cual pretenden llegar, y estoy muy cómodo con ambas alternativas. Al final queremos ir al mismo lugar, entonces eso nos convierte en un espacio con posibilidades de gobernabilidad. Las formas de ese objetivo son distintas, está claro, con diferentes velocidades o formas de gestión; pero el resultado al que se procura llegar es el mismo. No tengo dudas de que el 13 va a estar todo el espacio integrado atrás de un solo candidato de Juntos por el Cambio.
-¿Tiene preferencias por alguno de los dos?
-Sí, tengo mi definición tomada, pero me voy a guardar.
-¿Por qué? hay varios que han anunciado su inclinación...
-Soy precandidato en primera instancia de ambas fórmulas y reitero que estoy muy cómodo en las dos propuestas, que van hacia el mismo fin. A veces las diferencias de nuestro espacio se hacen muy grandilocuentes con voceros o terceros que agitan una interna que en este momento no debería escalar. Yo elegiría que eso no suceda, pero me parece que mediáticamente se exageran algunas diferencias que son de velocidades, de forma, pero que no tienen una diferencia de fondo.
-Pero también ha habido fuertes críticas entre ellos mismos...
-Sí, si me das a elegir, elegiría otro tono, pero estamos en una elección y la competencia del día 13 es Bullrich-Larreta; después vamos a tener la lectura de los votos sacados por frente. Luego veremos cómo se integra, pero el frente se mantiene totalmente unido.
- Insisto, ¿es lo mismo que gane Bullrich o Larreta?
-No, claramente no es lo mismo, de ninguna manera. Las formas, las velocidades propuestas por ambas fórmulas son distintas. Si se tiene que salir del cepo o no, no hay ninguna diferencia, el tema es de qué manera y a qué velocidad.
-¿Pero eso no tiene consecuencias positivas o negativas? la forma en aplicar las medidas...
-No es lo mismo, pero ¿qué Argentina vemos en el 2027? Una sin cepo, una con diálogo con el mundo, entre otros. En eso creo que no hay ninguna duda entre los dos espacios.
-¿Y por qué hay una preferencia entre los dos espacios que usted prefiere no blanquear?
-Yo quiero trabajar para solucionar los problemas de Argentina. Me gustaría que el Gobierno deje de agravarlos. Creo que no hay duda de que los dos precandidatos quieren lo mismo.
-¿Qué agenda de reformas económicas pretende plantear en el Congreso si gana Juntos por el Cambio?
-En ese universo, mi objetivo es trabajar y aportar fuerte en todo el paquete de reformas para un orden económico nacional que envíe el Poder Ejecutivo. De igual manera tengo dos grandes propuestas. Una es la reforma de la Carta Orgánica del Banco Central. Para decirlo simple, en frenar la emisión monetaria; o más sencillo, prohibirle al Banco Central financiar el Tesoro Nacional. Un Banco Central independiente ya lo es por Carta Orgánica, pero en la práctica no lo es. Tiene que tener como único objeto la estabilidad de la moneda y frenar la inflación, así como también un ordenamiento fiscal. El otro es bajar cargas laborales. Hay que trabajar en formalizar el empleo y centrarse en las contingencias laborales, en todos los riesgos que tiene una pyme cuando toma un empleado. A partir de ahí hay mucha potencialidad para crecer, para tener más formalidad, para que crezcan los salarios y por ende el país.
-Últimamente el Congreso no trata las necesidades de la gente, como la ley de Alquileres, y se queda inmerso en las internas políticas, ¿es posible cambiar eso?
-Absolutamente. Yo soy uno de los 257 diputados, en un espacio opositor. Alquileres o los créditos UVA son problemas de la pérdida del poder adquisitivo, donde cada vez todo se hace más caro. Nosotros procuramos derogar la ley (de alquileres) y el kirchnerismo y la izquierda votaron que no. Por supuesto que se puede trabajar en la agenda de los problemas. No es simple, pero no hay nada más mediocre que esconderlos.
-¿Volvería a la gestión si Cornejo es gobernador?
-La pregunta es potencial, ¿volvería? Sí, sin duda que volvería. Me apasiona la gestión pública. Creo que tenemos muchos pendientes, sin ningún lugar a dudas, pero muchísimos resultados positivos para mostrar. De todas maneras, dicho eso, como candidato a diputado nacional es donde me estoy presentando y creo que puedo trabajar en todo lo que va a requerir nuestro país, aportando desde una banca en representación de la provincia. A eso me postulo y ese cargo voy a ejercer.
-¿Cómo ve posicionada a Mendoza a nivel nacional?
-Mendoza ha hecho sus cambios estructurales. Quedan muchos por hacer, pero hoy está en un contexto que si tenemos una Argentina que despega en lo económico, lo hará mucho más nuestra provincia. El orden fiscal, haber bajado contingencias laborales, tener una justicia más ágil, hace un Estado que hoye es mucho más dinámico. Y después, permitime ser optimista con Argentina. Tenemos la posibilidad de empezar a hacer bien las cosas. Va a llevar varios años corregir la situación actual, pero si hay luz al final del túnel y cambia rápidamente el horizonte económico con la potenciación de hidrocarburos, minerales, economía del conocimiento y turismo, el país tiene condiciones para generar los dólares, crecimiento, trabajo, salarios reales. Argentina puede recuperar su economía, su orden social, su moralidad, pero veo un horizonte positivo.