La candidata a presidente por el Frente de Izquierda y Trabajadores-Unidad (FIT), Myriam Bregman, intentará en las elecciones del próximo domingo mantener a su espacio como la garantía de resistencia ante el ajuste que promueven la mayoría de sus rivales.
La diputada nacional de 51 años de edad cuenta con experiencia en la contienda presidencial: en 2015 secundó en la fórmula a Nicolás del Caño, su actual candidato a vicepresidente.
En las PASO, su binomio se impuso en la contienda interna de la izquierda y cosechó el 2,7% del total de los votos para ubicarse en el quinto puesto.
Bregman tiene una larga trayectoria en la militancia, fue abogada querellante en varios juicios contra represores de la última dictadura militar (1976-1983) y lideró la lucha del feminismo.
En la campaña, centró sus discursos en presentar a la izquierda como la única alternativa para enfrentar las políticas de reducción del gasto público que, con distintas versiones, planean encarar los candidatos por La Libertad Avanza, Javier Milei, y por Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, para alcanzar el equilibrio fiscal.
“Que la crisis la paguen quienes la generaron, que son los grandes empresarios, los bancos y los terratenientes”, planteó la candidata del FIT a lo largo de la campaña. quien propone rompero con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y desconocer la deuda con ese organismo multilateral que asciende a los 45.000 millones de dólares y que tomó el ex presidente Mauricio Macri en 2018.
Bregman pretende que los salarios y las jubilaciones se actualicen una vez por mes para compensar el golpe de la inflación. En el debate presidencial ganó protagonismo con las confrontaciones que mantuvo con sus rivales. El “gatito mimoso” fue uno de los más grandes aciertos de la candidata de izquierda.
Su misión en esta ronda electoral será demostrar que la izquierda no perdió el tradicional rol para contener las consignas que representan a los sectores de la juventud, ahora asociados con referentes de derecha como Milei.
“Es mentira que toda la juventud se hizo de derecha, sino que hay mucha juventud que piensa que hay otros valores que defender”, diferenció.