Con la aprobación legislativa esta semana de las 34 declaraciones de impacto ambiental de proyectos de cobre aglutinados en Malargüe Distrito Minero Occidental (MDMO), las principales empresas que tienen a cargo las áreas ya comenzaron el proceso administrativo, con el objetivo de iniciar rápidamente los trabajos de exploración de cobre, metal cuya demanda internacional está en alza en momentos de transición energética a nivel mundial.
Los avances son ágiles por parte de los referentes de las empresas y la gran mayoría entrará en el campo en los próximos días. “En 15 o 20 días ya vamos a estar realizando las primeras prospecciones, si ya no hay nieve en la zona. Tenemos presupuesto y queremos ser expeditivos”, señaló a Los Andes Julio Pulisich, uno de los socios de Apeleg SA, empresa que tiene posesión de más de la mitad de los proyectos del MDMO (19 de las 34 áreas de exploración minera).
El resto de las empresas manejan tiempos similares. De hecho, las ocho primeras firmas seleccionadas para iniciar las tareas fueron -además de Apeleg- Hanaq Argentina SA, Apeleg SA, Agaucu SA, Ontario Inc., Nueva Gran Victoria, Raúl Concina, Caccavari y Cóndor Prospecting.
La necesidad de tener aprobadas las Declaraciones de Impacto Ambiental (DIA) de las iniciativas tuvieron que ver con el momento del año en términos climáticos. La ventana de exploración en el campo minero, sobre todo en territorio bien al oeste de Mendoza, donde se trabaja a alta altitud, arranca en noviembre y finaliza entre marzo y abril, según aseguraron a este diario referentes del sector, debido a que en época de frío no hay acceso a las zonas por las bajas temperaturas y la gran cantidad de nieve.
Si no se comienza en momentos de altas temperaturas, el trabajo en el campo pasará a la primavera/verano de la próxima temporada; y en el Gobierno pretenden que esto no ocurra, ya que han estado acelerando los procesos para “dejar de perder tiempo valioso” en términos de recepción de inversiones, como ha sido el caso de San Juan, que las tendrá cercanas a los U$S1.000 millones en minería, energías renovables y desarrollo de cales industriales, dentro del Régimen de Incentivos para las Grandes Inversiones (RIGI).
Si bien hay cautela en torno a las aproximaciones de esta nueva etapa exploratoria, referentes del sector aseguran que, de entrada, invertirán entre U$S 100.000 y U$S 250.000. No obstante, este número no es lineal, ya que si las primeras etapas de prospección no son positivas, se caerá la propia exploración al campo.
Emilio Guiñazú, exfuncionario de la cartera de Energía y hoy titular de Impulsa Mendoza (que tiene el proyecto El Seguro, dentro del MDMO), señaló a Los Andes que en el área se realizarán inversiones por unos U$S 250.000 esta temporada “dependiendo del tiempo y los resultados que se obtengan”. En tanto, Pulisich señaló que invertirán U$S 100.000 y que están a la búsqueda y análisis de inversionistas.
Sostuvo de igual modo que “cumplir todas las tareas que están aprobadas en esta DIA implica inversiones mínimas de U$S 2 millones, sin contar con los caminos”, añadió Guiñazú.
Respecto a los empleados, algunos sostienen que cada proyecto podría contar con entre 15 y 30 trabajadores, aunque también acotaron que estos números “son relativos”, teniendo en cuenta el éxito de las primeras aproximaciones y las etapas que se estén atravesando.
“No todos los proyectos van a hacer todo, ya que algunos no tendrán resultados”, aclaró Guiñazú. De hecho, en el Poder Ejecutivo señalaron que si de los 34 proyectos, tienen resultados positivos entre cuatro o cinco, “será todo un éxito”. Más aún, Raúl Rodríguez, Presidente de la Cámara de Empresarios Mineros de Mendoza (Camem), expresó que con tan solo “uno o dos proyectos” aptos para pensar en una explotación, “será una gran noticia para Mendoza”.
Etapas
Guiñazú sostuvo que la primera etapa arranca con un relevamiento geomorfológico, que es donde se detectan “anomalías” en campo que puedan dar indicios de yacimientos del mineral. Luego de eso se realiza una recolección de muestras y posterior análisis geoquímico de esas muestras en laboratorio.
Si las muestras dan buenos resultados, se procede a hacer “geofísica”, que es la medición de variación de campos magnéticos y gravitacionales, a través de aviones, drones, o instrumentos manuales recorriendo el sitio. También se puede “densificar” la zona a través de la toma de muestras para “completar la geoquímica y determinar los halos de dispersión de las anomalías detectadas”, marcó.
”Con esta información se empiezan a elaborar modelos geológicos qué permiten esbozar los primeros tests de perforación”, pero hasta ese momento “no se realizan huellas, caminos; y no se realizan tampoco perforaciones”.
Para el especialista, tras esas primeras avanzadas “se invierten entre U$S 100.000 y U$S 200.000; y agregó que aquí aparece el primer gran filtro, ya que “muchos de los proyectos no superan esta etapa”. “Si los resultados son positivos, recién ahí se piensa en movilizar un equipo y empezar a hacer alguna perforación para confirmar el modelo geológico”.
En el caso de Hierro Indio, al tener buenos resultados, se perforaron 2.480 metros, distribuidos en 41 pozos de 60 metros de promedio cada uno.
Buenas expectativas e inversiones en puerta
Desde Impulsa no tienen intención de asociarse con ninguna otra empresa, como sí ocurrió con Hierro Indio (donde el Estado mendocino invirtió U$S 1 millón a través de PRC). En el caso de Apeleg, Pulisich sostuvo que sí están en la búsqueda de inversiones, y aseguró que tienen intereses “fuertes” de empresas de Brasil, Canadá, Australia, Bolivia y también de Argentina .
Además señaló que iniciaron un viaje de negocios esta semana hacia Arabia Saudita, Omán y Dubai, donde van con la carpeta de proyectos del MDMO. “Ya teníamos a varias empresas detrás de inversiones en estos proyectos, ahora con las DIA aprobadas, el panorama es aún mejor”, aclaró.
“Nuestra intención es iniciar en el campo de forma inmediata. Algunos de los proyectos que tenemos son de un acceso más fácil, pero a otros tenemos unos dos días para llegar y necesitamos armar campamentos y otra logística. Pero vamos a hacer aproximaciones al campo en todos los casos esta temporada”, aclaró.
Otras empresas prometen inversiones de por lo menos U$S 20 millones, como es el caso de Kobrea, para los siete proyectos que tiene dentro del MDMO.
Raúl Rodríguez, por su parte, señaló que las perspectivas desde la Camem es que la gran mayoría de las empresas intente aprovechar el verano para realizar la exploración, aunque agregó que las empresas deberán poner el foco en “la logística, el tiempo y la financiación” para trabajar efectivamente este este verano.
Respecto a las expectativas del MDMO y estos 34 proyectos, marcó que en el rubro minero son “optimistas” desde el día uno; “más allá que la media internacional marque que de 100 proyectos, uno termina teniendo éxito. Creemos que habrá buenos resultados en Malargüe”, finalizó.