El presidente Javier Milei advirtió esta noche que la firma del Pacto de Mayo en Tucumán es, “después de tanta división”, un “símbolo del cambio de época”, y cuestionó a los gobernadores que no asistieron por “anteojeras ideológicas” y por no querer “ceder sus privilegios”.
“Nosotros no miramos para atrás ni mantenemos rencores, lo único que tiene que hacer la política es llevar las ideas a la realidad”, expresó Milei al brindar un discurso desde Tucumán por cadena nacional.
Milei sostuvo además que “la Argentina grande” del pasado “parece un sueño lejano” y destacó: “Quiero agradecerle a todos los presentes por haber venido a la casa histórica de nuestra Independencia”.
“Nos reunimos para reafirmar nuestros votos patrióticos”, remarcó Milei al iniciar su discurso tras la firma del Pacto de Mayo en Tucumán.
El presidente sostuvo que “la defensa de la propiedad es la defensa de un derecho y el camino del crecimiento económico”, por lo que prometió: “Desde el Gobierno perseguiremos una agresiva agenda de desregulación económica”.
Asimismo, el mandatario nacional reiteró que “el equilibrio fiscal es innegociable”.
También afirmó que los 10 puntos del Pacto de Tucumán “son leyes básicas inalterables de la economía” y “matemática inobjetable”.
Al brindar un discurso por cadena nacional desde Tucumán, Milei planteó: “Cuando obedecimos estos principios como nación nos fue tan bien en tan poco tiempo que fuimos envidia del mundo entero”.
En ese sentido, el jefe de Estado anunció que “se terminó el chamanismo económico” y remarcó que se debe “hacer lo que funcionó en todo el mundo”.
El mandatario aseguró también que “un Estado chico con funciones delimitadas vale más que un Estado grande que dilapida los recursos y bloquea la prosperidad”.
“Dese el Estado nacional demostramos nuestro compromiso haciendo la reducción del gasto público más grande de la historia nacional, los aquí firmantes se hicieron responsables de hacer lo mismo en sus distritos”, remarcó.
Y al hablar del sistema educativo, agregó: “No se puede inculcar que el capitalismo es malo”, y pidió virar a “una educación útil y moderna”.
Milei sostuvo que la Argentina “tiene que dejar de ser un infierno fiscal para quienes trabajan, se esfuerzan e invierten”.
Al brindar un discurso, el mandatario nacional expresó que “la reducción del Estado tiene que venir acompañada de una merma en el sistema fiscal de la economía”, y cuestionó la “voracidad fiscal”.